domingo, 30 de junio de 2019

YO HAGO LA LUZ

¿Yo que hago nacer, no daré a luz ? Dijo Jehová. ¿Yo que hago engendrar, seré detenido? Dice el Dios tuyo. Isaías 66:9.
Vivimos en un mundo de esperanzas frustradas y promesas quebrantadas. En un mundo de fantasías y ilusiones. Todos nos mentimos y nadie dice la verdad, este es nuestro mundo patético. 

Es el “juego de la vida” Esta llenos de trampas y ilusiones. Muchísimas personas se vuelven cínicas, otras se abaten, y otras son maliciosamente orteras. 

La tragedia de los corazones quebrantados y endurecidos y la causa enorme dolor al corazón de nuestro fiel Padre celestial. La obra del espíritu Santo es enorme, no tiene limite, y ademas es duradera. 

El Espíritu Santo tiene que trabajar con personas de todo tipo, y condiciones sociales muy diferentes. Quiere restablecer las relaciones del Padre con el hombre. 

El desea asegurarnos de sus buenas intenciones con respecto a nosotros, pero por nuestras relaciones con los demás hemos adquirido una cautela que puede paralizar nuestra fe. 

¿Se ha preguntado secretamente si Dios realmente, si Dios cumplirá todo lo que ha prometido? 

¿Está interesado en un experiencia aislada llamada “fe que vacila” separada de los beneficios concretos de mantener una relación continua con El? La pregunta es: ¿No haré nacer? Aquí se hace resalta la seriedad del propósito de Dios con su pueblo. 

Tanto el fracaso de Israel en cumplir el propósito divino no se debió a ninguna deficiencia de la gracia divina. 

Dios tampoco permitiría que el fracaso de Israel de antaño y transitorio pudiera frustra los planes de redimir a la humanidad. 

Hoy pasa lo mismo, los planes de Dios, se cumplirá para redimir a la humanidad, a pesar de la incredulidad de su pueblo. El Espíritu Santo esta obrando en los corazones de los hombres. 

Muchos cederán a su influencia, otros lo rechazaran. Dios cumplirá todo lo que ha prometido, y Él esta interesado que tengamos una experiencia personal con él “fe que no vacila”. 

A medida que lo conozcamos, comenzaremos a comprender que es totalmente confiable. El no juega con nosotros. 

Sus promesas son sólidas como El mismo, porque, en esencia en cada promesa se está ofreciendo a sí mismo. 

Isaías revela el gran amor de Dios por su pueblo, al igual que una madre lleva a su hijo en brazos por los caminos. 

Cuando llegue los chascos, podemos estar seguros de que el último capitulo de la historia de la tierra todavía no ha sido escrito. 
Podemos mantenernos inalterables en nuestras aspiraciones, sin desviarnos a medida que avancemos hacia la eternidad.
MARANATA.
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NOTIFICACION A LOS LECTORES.
Notificación: Estimados lectores de este blog. Hace tiempo que parezco de un problema de salud, que abecés me impide desarrollar este ministerio. En otras ocasiones les pedí que orase por mi, y sus oraciones fueron contestadas, pues recupere la salud. Hoy les insto a que oren por mi, para que me recupere de esta dolencia que arrastro barios meses. Se que vuestras oraciones llegaran al trono de la gracia y si es la voluntad de Dios me pondré bien. Las oraciones del justo llegan al trono de la gracia. El Señor nos dice: Orar los unos por los otros para que Vuestro Padre sea glorificado. Que Dios os bendiga y que su paz sea sobre ustedes. Sal. 62: 7

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