Nuestro relato es sobre una mujer
consagrada al ministerio de los niños. Esta historia se remonta al
siglo XX de nuestra era cristiana.
La señorita Ruth Paxton de 35
años fue llamada como misionera a la región más alejada de China.
Una de las cosas que ella realizo era trabajar con los niños, ya que
es el futuro del mañana.
Ella colaboro con los diferentes misioneros
de otras denominaciones, y el resultado fue maravilloso. Ella Ruth P.
edito un libro titulado Rivers of Living Water (Ríos de agua viva).
En ese libro nos habla de la obra del Espíritu Santo, y la
santificación que esta disponible para aquellos que lo deseen.
Debemos de comprender que la santificación del Espíritu Santo
significa santidad de vida, y debemos de vivir de acuerdo a los
requerimientos del Espíritu Santo.
Cada cristianos, no importa de que denominación sea, pues todos somos hijos del gran Dios.
Cada cristianos, no importa de que denominación sea, pues todos somos hijos del gran Dios.
“Cada
cristiano está llamado a una vida santa -,pero muchos cristianos no
quieren ser santos.
El Espíritu Santo no puede hacer nada.
Quizás deseen ser espirituales, con una apariencia de piedad, pero estas personas no tienen temor de ser santos a lo que estas personas llaman ser santos.
El Espíritu Santo no puede hacer nada.
Quizás deseen ser espirituales, con una apariencia de piedad, pero estas personas no tienen temor de ser santos a lo que estas personas llaman ser santos.
No robar, no cometer adulterio y un largo etc. ¿Que
implica ser un santo para un cristiano? Apartarse a las montañas
como un ermitaño ¡No! La santidad no es una perfección sin pecado
ni la erradicación de la naturaleza pecaminosa, ni verse libre de
cualquier falta.
Tampoco lo coloca a uno más allá de la posibilidad
de pecar ni eliminar la presencia del pecado. “La Santidad de las
Escrituras es estar sin culpa a la vista de Dios”
Es el
llamamiento de Dios, junto con la actividad santificadora del
Espíritu Santo, que nos conduce a la obediencia que puede definirse
con la perfecta sumisión a la voluntad de Dios. (ver 22).
Esto nos
lleva a reflexionar ya que debemos ser “guardados irreprensibles'
para su venida y seremos presentados 'sin mancha' delante de la
gloria del Padre (1º Tes. 5:23).
La santidad es Cristo, y es
nuestra santificación, entronizado con la Vida de Cristo. Es Cristo,
el Santo, en nosotros, viviendo, hablando, caminando, con El.
¡No
es de extrañar que Satanás trate de impedir que los cristianos
comprenda lo que significa la plenitud del Espíritu Santo en su
vida!
Es a través de la santificación del Espíritu Santo que se
realiza en nuestra vida vemos la gran obra y el pleno significado de
Jesús en nosotros.
Mediante el Espíritu Santo tenemos poder victorioso en Jesús y en él somos considerados justos como si nunca hubiésemos pecado.
Mediante el Espíritu Santo tenemos poder victorioso en Jesús y en él somos considerados justos como si nunca hubiésemos pecado.
MARANATA.
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a través del tiempo y del espacio
NOTIFICACION A LOS LECTORES.
Notificación: Estimados lectores
de este blog. Hace tiempo que parezco de un problema de salud, que
abecés me impide desarrollar este ministerio. En otras ocasiones les
pedí que orase por mi, y sus oraciones fueron contestadas, pues
recupere la salud. Hoy les insto a que oren por mi, para que me
recupere de esta dolencia que arrastro barios meses. Se que vuestras
oraciones llegaran al trono de la gracia y si es la voluntad de Dios
me pondré bien. Las oraciones del justo llegan al trono de la
gracia. El Señor nos dice: Orar los unos por los otros para que
Vuestro Padre sea glorificado. Que Dios os bendiga y que su paz sea
sobre ustedes. Sal. 62: 7
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