¿POR EL PODER DE QUIEN?

Pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno. Marco. 3:29
El Espíritu Santo es el representante de Dios en la tierra, no hay nadie más. La naturaleza del Espíritu Santo es un misterio para el hombre. 

Se acepta por fe. Cristo dijo a sus discípulos: “Os conviene que yo me valla”,(Jun 16:7) porque así podrá mandar el Espíritu Santo con poder. 

Los escribas y fariseos de Israel, dominados por Satanás cometieron el mayor pecado. 

Los fariseos trataban de hacer creer a todos los oyentes, que Jesus estaba unido con Satanás. 

Así de esta manera querían difamarlo, pero en verdad es que estaban cometiendo el gran pecado contra el Espíritu Santo. 

“Y todo lo que no proviene de fe es pecado”. El Espíritu Santo convence al hombre de pecado, y el pecado es transgresión de la ley (1º Juan. 3:4); por lo tanto, el Espíritu sostiene el carácter justo e inmutable de la ley. 

Los fariseos le dijeron que estaba actuando con el poder de Satanás (Mac. 3:21-22). 

Y le declararon que tenía un espíritu inmundo, significando que sus acciones externas eran un manto para dominar mediante un poder interior corrupto, autograficánte (ver. 30). 

Cuando Marcos escribió a los cristianos, ellos estaban enfrentando las mismas acusaciones por parte de las autoridades Judías y romanas que Jesús había enfrentado cuando había obrado poderosamente con el Espíritu Santo. 

Para los cristianos y para todos los siguientes hijos de Dios a través de los tiempos, había sido una advertencia contra esa actitud del rechazo del Espíritu Santo. Después del tercer y el quinto siglo de nuestra era. 

El arrogarse tener poder del Espíritu Santo para perdonar pecados, es también un pecado imperdonable. Durante la Edad media, hombres y mujeres fueron llenos del Espíritu Santo para proclamar la palabra de Dios. 

Muchos, la gran mayoría, fueron acusados de poseer espíritus de demonios y predicar herejías y de ir en contra de la iglesia dominante. 

Cuando el Espíritu sea derramado sobre el pueblo escogido, que guarda los mandamientos de Dios y tienen la fe de Jesús, serán acusados de herejes. 

Dios ha escogido trabajar mediante instrumentos imperfectos, como tú y yo, pero si se necesita tener una obra, él puede hacerlo en su propio momento y manera. 

Hasta entonces, siempre podemos aplicar las palabras que dice: “Por sus frutos [no rumores] los conoceréis” (Mat. 7:20). Padre, ayúdanos siempre a esta dispuestos a hacer tu trabajo, en tiempos fáciles o difíciles; y si morimos o vivimos que sea todo para tu Gloria.
[Gracias por buestras oraciones, estoy bastante bien de los picores, aun que espero con la ayuda de Dios se me corija. No se vuestras creencias, pero se que Dios os escucha. Ruego a Dios que os de su bendición. Gracias por todo].
Maranata.
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