lunes, 17 de diciembre de 2018

UNA RAZON SUPERIOR

 De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso; como está escrito: Para que sea justificado en tu palabra, y veraz cuando fuere juzgado. Rom. 3:4
En cierta ocasión se contó la historia de un abogado que preparo una defensa de un cliente muy famoso. Con sumo cuidado, analizo minuciosamente todas las áreas en la que el fiscal pudiese utilizar en su contra. 

Anticipó todas las posibles dificultades legales; todo aspecto de credibilidad los testimonios de su defensa. El sabía que el fiscal era un duro oponente y muy astuto y inteligente, el no quería encontrarse con sorpresas. 

Los argumentos se lo presento a su cliente, y el dijo “¡Suficiente! Su defensa es muy solida. Estoy seguro que el juez fallará a mi favor”. El abogado guardo silencio, Y con una mirada perdida exclamo: “¡ lo más importante son los detalles, los detalles!” 

El sabía, que ganar este caso establecía un procedente. Este hombre era el más cruel de los asesinos. Por lo que continuó trabajando con cautela. Todo el mundo esta condenado frente a la gran norma moral de justicia.

Cada alma que ha vivido en la tierra recibirá su sentencia en el gran día del juicio de acuerdo con sus hechos, si han sido buenos o malos según la luz de la ley de Dios. 

Para aquellos que dicen que la ley de Dios fue abolida en la cruz, no tienen que tener miedo ya que para ellos no hay ley.

¿Y si hubiese una ley? ¿Un Dios inmutable puede cambiar su ley? ¡No! Pues la base de su gobierno es la ley. El Espíritu Santo nos recuerda cual es la ley, y el significarlo de obedecer dicha ley. 

Cuán estrechos de miras es el hombre al que creer en las sesiones de juicio celestial se centra en nosotros;hay mundos que no han ciado. El autor del pecado sera juzgado minuciosamente por la corte suprema del cielo.

¡Cuán rápidamente desaparecerán cada subterfugio, cada excusa mentirosa! Los hombres verán cuál ha sido su elección. El pueblo de Dios los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús, verán la convicción que el veredicto de Dios es veraz. 

Y que Dios siempre dijo la verdad. Su pueblo anhela de todo corazón que esto ocurra, no sólo porque está celoso de su reputación, sino porque desea que la tragedia y el dolor cese en todo el universo.
Estas son las que impulsan sus vidas y los conduce a reflejar a otros la belleza celestial para que éstos elijan a Dios. De una cosa estamos seguro: 

Dios sera vindicado como un Dios justo, la decisión divina es mantener una relación estrecha con aquellos que quieren ser fieles a Dios y que guarden sus mandamientos. 
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blohspot.com 
http://historiaybilia.blogspot.com
http://segunda venida apocalíptica
http://viajes a través del tiempo y del espacio
http://Alientos de vida eterna.blogspot.com 


No hay comentarios:

Publicar un comentario