martes, 7 de abril de 2015

LOS SEPULCROS NO SE ABRIERON.


Y pondré las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. . . Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mi malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. Mat. 25:33-41.

Los que están a la derecha reciben un honores y bendiciones (Gén.48:13-14; Marc. 14:62; 16:19; Col.3:1 etc). Aunque no se emplea pa frase, el ser “benditos” es también ser “bienaventurado”Aquellos que reciben las bendiciones de Dios son verdaderamente bienaventurados. 

¿Por qué? Porque se han realizado en ellos la transformación y la obra de su redentor, a través de las edades. Y también son bienaventurados por que están en la “presencia” de Dios y hay “plenitud de gozo” y “delicia” a su diestra para siempre.

El plan original de Dios para este mundo, transitoriamente interrumpido por la entrada del pecado, finalmente culminará con éxito la voluntad divina será suprema en esta tierra, así como en los cielos. El plan de Dios es restaurar lo que se había perdido.

Yo, te pido que por un momento que cuando leas esta matutina, cierres los ojos y medita en este pensamiento. An fallecido nuestro más queridos amigos y familia. Nos encontramos algunos en las montañas, otros en los inmensos y oscuros calabozos. Sentimos en nuestro interior una paz que no se puede describir.

Los acontecimientos se suceden con rapidez, muchos esta arrodillados otros están mirando al cielo expectantes a lo que esta pasando. 

El cielo esta azulado hermoso, notamos que no hay brisa, ni mucho calor, tus ojos se fijan en una pequeña nube. Al acercarse, la nube se torna más grande, tu corazón palpita más deprisa de lo normal, pero tu no apartas tu vista de la nube que se hace más grande y más brillantes.

Por fin se transforma en un cumulo viviente de seres angélicos. Te se hace un nudo en la garganta, tu corazón palpita más y más deprisa. El glorioso ejercito celestial está tan cerca que es posible ver el rosto de Cristo. 

Su poder y su majestad son abrumadores. Muchos están atemorizados porque no saben si están salvados o perdidos, pero dentro de su interior sienten que están en la presencia de su Señor y están con vida. Y nustra esperanza se transforma en gozo cuando se oye las palabras de Cristo: “¡Bástaos mi gracia¡” (C.S. p.699). 

Luego el dador de la vida exclama: “¡ Despertaos, despertaos, despertaos, los que dormís en el polvo, y levantaos. Con asombro miramos a Jesús, vemos una sonrisa y con voz melodiosa dice: Venid benditos de mi Padre heredad el reino que esta preparado para vosotros desde la fundación del mundo.

Pero contemplamos que las tumbas donde hay muchos amigos no se abren, esta la tumba de ese anciano, que era un gran predicador, oh esa hermana que era tan consagrada; pero vemos aquel vecino malo y cruel levantarse de la tumba.

 Pero no vemos a nuestra esposa o esposo, ni a nuestro hijo. ¿Podemos imaginarnos el dolor de esa esposa o ese esposo en esos momentos?¡No! No ahy dolor, porque en nuestro corazón hay paz y gozo.

Esta es la escena más desagradable que se puede contemplar y que indudablemente ocurrirá. Jesús dejo claramente establecido que uno será tomado y otro dejado. 

 Estamos viviendo claramente en momentos muy solemne, Cristo esta cerca más de lo que nos imaginamos. No dejemos pasar hoy la oportunidad, consagremos nos al Señor. La buena nueva es que podemos ser salvo.
Maranata
Sigan orando por la vista de mi esposa.
Luis José de Madariaga.
La Biblia a través del tiempo.
http:// segunda venida apocalíptica

No hay comentarios:

Publicar un comentario