Diles: Vivo yo, dice
Jehová, que no quiero la muerte del impío (infiel), sino que se
vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de
vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis? Ezequiel 33:11.
Ezequiel anima a su
compañero con la seguridad de que Dios no quiere que muera. Desea
que todos ser se arrepientan y vivan. (2º Pedro 3:9). El cautiverio
que el hombre esta pasando por este mundo de maldad, de derramamiento
de sangre y de violencia que esta llenando la copa del Señor.
En este transitar de
las naciones,el hombre debe de recapacitar sus actos violentos y
llevarle al arrepentimiento. Dios advierte que ninguna justicia
anterior cubrirá la transgresión presente.
Por otra parte Dios
advierte, que ninguna maldad podrá excluir al pecador de alcanzar la
misericordia si hay un sincero arrepentimiento y abandona de su
maldad.
En este contesto nos
encontramos con dos grupos, el primero son aquellos que creen que se
salva por las obras meritorias. Tanto cristianos como musulmanes
creen las obras, y que estas les llevan al paraíso o al cielo. Y
otros por la fe, pero esta fe hace las buenas obras. Los fariseos no
tenían la percepción de la ley.
Los que pertenece al
primer apartado, no creen en la ley de Dios, no aceptan el contenido
de la palabra de Dios, pues una compresión a medias no es valida o
no salva. La ley de Dios es de orden divino inmutable como Dios
mismo.
Esta ley no ha sido
para perjudica al hombre, No, sino para dar vida y en abundancia. “Y
mando Jehová que cumplamos todos los estatutos, y que temamos a
Jehová (respeto, reverencia)
nuestro Dios, para
que nos vaya todos los días, y para que nos conserve la vida, como
hasta hoy” (Dut. 6:24). La verdadera libertad se halla en el
camino de la ley. Las leyes divinas fueron promulgadas para nuestro
bien. Abraham las cumplió y se gozo en obedecer a Dios.
La ley de la
gravedad es una bendición sin ella estaríamos perdidos. Los
astronautas y los paracaidistas la consideran una bendición. Incluso
la ley del dolor es una bendición, por que nos avisa de que hay un
problema. David se refirió a la ley como instrumento de advertencia
cuando dijo: “Tu siervo es además amonestado con ellos [los
mandamientos]; en guardarlos hay grande galardón.
No es Dios que ciega
los ojos de los hombres y endurece su corazón. El les manda luz
para corregir sus errores, y conducirlos por sendas seguras; es por
rechazamiento de esta luz como los ojos se ciegan y el corazón se
endurece.Con frecuencia, esto se realiza gradualmente y casi imperceptiblemente.
Viene la luz al alma
por la palabra de Dios, por sus siervos , o por la intervención
directa del Espíritu Santo; pero cuando un rayo de luz es
despreciado, se produce un embotamiento parcial de las percepciones
espirituales, y se discierne menos claramente la segunda revelación
de la luz.
MARANATA.
Les
agradezco sus oraciones, no estoy muy bien, pero por la gracia de
Dios se que me recuperare de la vista. Sigan orando por mi
recuperación. Que la paz de Nuestro Señor Jesucristo
sea
con ustedes.
Luis
José de Madariaga.
La
Biblia a través del tiempo.
http://
segunda venida apocalíptica
No hay comentarios:
Publicar un comentario