lunes, 10 de marzo de 2014

LA HIPOCRESIA DE ESTE MUNDO.

¡Hay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!  Porque sois semejante a sepulcros blanqueados, que de fuera, a la verdad,se muestra hermosos, mas de dentro están llenos de huesos de muerto y todo suciedad. (o inmundicia) (Mat. 23:22,27.).
 En la tradición judía según la ley ritual, los sacerdotes no tenia que tener contacto con los muertos, ya que estaban expuestos a ser contaminados por lo que llamaríamos hoy día un virus. En algunos países suelen quemarlos, pero tienen contacto con su ser queridos.  En otros suele comer o pasar el día en la tumba del ser amado.

Según la Mishnah, era la constumbre blanquear la tumba el día 15 del mes de Adar (es entre Febrero y Marzo), un mes antes de la pascua, a fin de que los sacerdotes y los nazareos pudieran evitar la contaminación por tocar, sin querer, la tumbas (Shekalim 1. 1). (Núm. 19:11-22; cf. Hech23:3; Luc. 11:44).

Si Cristo censuraba a los fariseos y a los escribas por las complicadas precauciones que tomaban en asuntos sin importancia y por el descuido con que realizaban lo que era en verdad importante.  Para estos hombres piadosos, era más importante las formas que los hechos.

La pregunta se plantea cuando se dirige a nosotros los "llamados cristianos". Y esto me afecta a mi el primero. El enojarse contra tu hermano, sea de sangre, o de Iglesia. Oh llamar necio a tu hermano, llevarlo a la junta de Iglesia, llamar a tu hermana/o Fatuo ("estúpido", "tonto" "rebelde" "ambicioso".  Estamos demostrando que de cristianos no hay nada en nosotros, somos sepulcros blanqueados.  Nos portamos neciamente por motivos egoístas.

Haceros esta pregunta: ¿Dios aprobarían nuestra conducta ante tales hechos en nuestro rasgo de carácter?  No. Y vi que había algunos Judas entre los que profesan esperar a su Señor.  Satanás los domina, pero no lo saben.  Dios no puede aprobar el menor grado de codicia o egoísmo,[ y insultos a nuestros hermanos en la fe, ni decirles palabras ofensivas] y aborrece las oraciones y exhortaciones de aquellos que cultivan estos malos rasgos. (P.E. p.268) La cursiva es mía)  

Los que quieran entra en el cielo, deberán, con toda la energía que posean, alentar los principios del cielo.  En vez de marchitarse en el egoísmo, las malas palabras y los malos actos, sus almas se expanderán
en la benevolencia y en el amor.

Es necesario aprovechar toda oportunidad de hacer el bien unos a otros y cultivar así los principios del cielo.  Jesús fue presentado como el dechado perfecto.  Su vida fué sin interés egoísta,  y siempre hubo en él manifestación de benevolencia desinteresada. (Ibid 269).  Solo llevaremos al cielo el carácter de Cristo. (foto.buscando a Dios)

Me produce la más profunda tristeza cuando oigo: ¡Ya me cambiará Cristo mi carácter!   Amenos que no busquemos a Dios, con humildad y pidamos el Espíritu Santo, y pongamos de nuestra parte, no entraremos en el reino de nuestro Dios. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario