LA GRAN HIPOCRESÍA

Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puedo esconder. Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifique a vuestro Padre que está en los cielos. Mat. 5:14-16.

Si el pueblo escogido de Dios, según su palabras son los que guardan sus mandamientos y la fe de Jesus, serán los que tienen la luz y deven esparcir la luz por el mundo. 

Juan dijo que “Jesús era la luz de los hombres” que brillaba en las tinieblas de este mundo.Si un cristiano es fiel a su misión una vez que ha aceptado a Jesús como su luz del mundo, se convierte en reflector de esa luz. 

Cuando la verdadera luz ilumina a los hombres, se lo exhorta a levantarse y resplandecer (Isa.60:1-3). Se representa a los que aman y sirven a Señor de la justicia infinita (Jueces. 5:31). 

La misión del pueblo de Dios, no debe ser vacilante ni cegadora, sino suave, y permanente, digna de confianza, calidad y positiva. La oscuridad sugiere depresión, temor, y inseguridad. 

El cristiano dice: que tienen luz, y todos sabemos que la luz es el entendimiento de la palabra de Dios. Su compresión de entender correctamente las profecías. 

Esa luz adquirida por la familia puede aprovechar la luz si se la coloca en un debido lugar, en el candelero para que alumbre. El cristiano es el candelero que alumbra, el mundo esta ha oscuras y hay que ponerlo en el medio para que alumbre. 

El Espíritu Santo ara su parte, pero nosotros tenemos que hacer la nuestra. El Dr. Sckman habló de 'la nueva hipocresía'. El declaro que la iglesia fue fuerte y dominante en la vida de las gentes. 

En ese tiempo, para ganar popularidad, muchas veces los hombres procuraban parecer mejores de lo que eran. Esa era la antigua hipocresía. Pero este concepto se mantiene todavía activo en la sociedad en la que vivimos.

Sabemos que la luz de la verdad proviene del cielo. (Jun.1:4), pero cuando ilumina nuestras vidas, se convierte en nuestra luz (Isa. 60:1-3; Efe. 5:14). La eficacia conque los discípulos llegaron a reflejar la luz de la verdad y el amor de Dios se hizo evidente su entrega al Señor. 

“No podemos dar lo que no tenemos”. Pero cuando el cristiano recibe la luz que le dio Cristo, este debe dar la luz que recibió a otros, para que Cristo sea glorificado.Satanás siempre ha procurado dar una falsa impresión del Padre. 

Es por eso que busca a los hijos de Dios más débiles y criticones para demostrar que no hay luz en el pueblo de Dios.

Cristo vino a disipar las tinieblas y revelar al Padre. Y solo hay una forma, a través de su pueblo. 

La luz debe de brillar para que los hombres vean la luz, sino para que gracias a la luz puedan ver la salvación a través de Cristo. Seamos imitadores de los que nos precedieron.

MARANATA.

http://meditacionesmatinales.bslogspot.com

http://lecciones-biblicas.blogspot.com

http://judaislacris.blogspot.com

http://historiaybiblia.blogspot.com

http://segunda venida apocalíptica

http://viajes a través del tiempo y del espacio

NOTIFICACION A LOS LECTORES.

Notificación: Estimados lectores de este blog. Estimados lectores de este blog. Por mi salud y por este proyecto Sal. 62:7.