sábado, 3 de agosto de 2019

BIENAVENTURADOS LOS QUE LLORAN.


Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación Mat. 5:4.
Cristo nos enseña en este maravilloso sermón del monte, las características de aquellos a quienes el Señor llama “Bienaventurados”. 

Cierto es, que toda la Biblia esta llena de instrucciones que son una bendición para el cristiano. Nadie que busque la verdad quedara en la penumbra y en la incertidumbre. 

Los cristianos sinceros que buscan a Dios, son aquellos que mediante la fe, la oración intima y ferviente y un estudio de las Escrituras procuran obtener las virtudes que se destacan en la Palabra de Dios y andan en la luz. 

Los que se niegan a seguir un “así diceJehová”, no tendrán excusa que presentar por su persistente resistencia contra la palabra de Dios (Cart. 258 de 1907). 

Para Cristo los que la humanidad califican de parias, de desechos de la humanidad, los que la sociedad desecha por no tener un estatus digno. 


Son aquellos a quienes él calificó como bienaventurados. 

So aquellos que no tienen un techo a donde cobijarse, y que la misma sociedad los desecha. 

¿Significa esta bienaventuranza que hay un premio para la tristeza? ¿Significa que Dios no desea que seamos felices en esta tierra? No. 

El camino a la felicidad, con frecuencia es un camino de dolor. 

Cuando se perjudica la salud, miramos hacia atrás vemos lo que hemos perdido por nuestra intolerancia. 

Muchas veces, cuando no estamos seguros de las bendiciones que la vida nos da, aprendemos lecciones que nos aseguran una felicidad permanente. 

Debido a las problemas de la vida, quedamos capacitados para reconocer los verdaderos valores de la vida Cristiana. No es bueno vivir impasibles en un mundo como este. 

Ningún seguidor de Cristo puede ser indiferente a los sufrimientos ajenos. Estas preocupaciones deben expresarse en acciones por los que sufren. 

Esa multitud que los dirigentes Judíos habían desechados, como parias de la sociedad, son los que Dios llaman Bienaventurados, porque son perseguidos y despreciados por la sociedad. 

Cristo también se refiere a los que son perseguidos por causa de la palabra. Son los que sufrían o sufren or causa de su nombre. 

Serán ricamente bendecidos convirtiéndose en herederos con Cristo. 

No es bueno poder vivir impasible en un mundo como el nuestro, mientras hay sufrimientos hambre y dolor en este mundo. “Bienaventurados los que lloran'. 

Son bienaventurados porque saben que su dolor, su angustia y sus privaciones son. . . los dolores de parto de un mundo mejor.
MARANATA.
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Notificación: Estimados lectores de este blog. Oren por mi salud y por este proyecto . Sal. 62: 7

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