El pueblo de Dios es muy
olvidadizo, guarda su ley, y olvida lo que ocurrió con Israel en el
pasado. Somos duros con los demás, y como nos olvidamos rápidamente
de lo que hacemos nosotros.
Israel fue un pueblo criticón, y muy
rebelde, y por ende se olvidaba de lo que Dios hacía constantemente
con ellos. Muchas veces me pregunto como podía haber gente tan
obstinada, especialmente a la vista de tantos milagros y tan
asombrosos.
Pero me miro yo en un espejo, y veo que no soy tan
diferentes de ellos. ¿Hay alguna diferencia entre el pueblo de
antaño y el pueblo de Laodicea?
La diferencia del AT es que son
muchas generaciones de historia en unos pocos capítulos, pero
tristemente tú y yo nos olvidamos de nuestro pacto hecho con Dio sen
el bautismo.¡Oh, necesitamos tener una buena memoria!
Si la fe es una relación
de confianza en Dios, basada en su confiable trato con nosotros en el
pasado, entonces Satanás puede hacer estragos en nuestra fe tan sólo
haciéndonos olvidar como fuimos rescatados.
La obra del Espíritu Santo es hacernos
recordar de donde venimos, y hacía donde vamos. Nos hace recordar
que Cristo murió por nosotros, y que por su gracia somos salvos.
Estamos vagando por un desiertos de naciones, pervertidas y
idolátricas y materialista. Pedro pone todos
los conceptos en un marco que el cristiano de hoy día pueda
comprenderlo. “toda diligencia “ significa mucho.
Es una
diligencia diaria. Hay peligro de que seamos ciegos en cuanto a la
obra de los agentes satánicos y que seamos entrampados por las
seductoras tentaciones. Por eso se nos da la orden “poniendo toda
diligencia”, añadir a nuestro carácter la gracia que os ara
fuerte para resistir el mal.
Fe, virtud, conocimiento, dominio
propio, paciencia, piedad, afecto fraternal y amor.
Al mirar esa lista de cualidades, el Espíritu Santo nos recordara que hay alguna que no están en nuestro corazón.
Al mirar esa lista de cualidades, el Espíritu Santo nos recordara que hay alguna que no están en nuestro corazón.
Por eso Pedro nos dice que somos
cortos de vista, Ciegos, y olvidadizos ya que Cristo nos limpio de
toda inmundicia, sólo tenemos que seguir a Jesús que pago todo por
nosotros.
No puede existir algo parecido a que alguien entre en el cielo sin estar preparado para el cielo.
No puede existir algo parecido a que alguien entre en el cielo sin estar preparado para el cielo.
La elección depende de
nuestro proceder, y no hay otra elección en la Biblia.La elección
está dentro de nuestro alcance. “Haciendo estas cosa, no caeremos
jamás” (MS.p.49).
MARANATA.
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