CADENA DE ORACIÓN

Por lo demás, hermanos, orar por nosotros, para que la palabra del Señor corra y sea glorificada, así como lo fue entre vosotros. 2º Tes. 3:1.
Entre el pueblo de Dios debería haber, en este tiempo, tan inestable, frecuentes períodos de oración sin cesar y fervientes. 

La mente debería estar continuamente en actitud de oración. 

En las casas y en las iglesias, ofrézcase fervientes oraciones en favor de los que se han dado a sí mismos a la predicación de la Palabra. Oren los creyentes como lo hacían los discípulos después de la ascensión de Cristo. 

No importa si usted esta en Lima, o en España, quizás estés en Australia, filipinas, oh Core del Sur, el lugar no es importante, pero si usted ora por sus hermanos de estos países del mundo, podemos hacer una cadena que ascienda al cielo. Una cadena de fervorosos creyentes en oración debería circular al rededor del mundo. 

Oren todos en humildad. Un grupo aquí, otro allí, todos podemos orar por el derramamiento del Espíritu Santo. 

Los que no puedan dejar su hogar reúnase un grupo con sus hijos para orar juntos. Un servidor vuestro, forma parte de una coral, el propósito de esta coral es de llevar el Evangelio a las cárceles de España, y dar conciertos. 

Hemos visto el poder de Dios a través del canto, oramos durante la semana y antes de salir para que él Señor toque los corazones, y os digo que lo hace. Nada es más necesario en la obra que los resultados prácticos de la comunión con Dios. 

Deberíamos celebrar convocaciones para la oración con Dios, pidiendo al Señor que abra el camino para que la verdad entre en las plazas fuertes donde Satanás ha instalado su trono, y disipe la sombra que ha echado sobre el camino de aquellos que está tratando de engañar y de destruir. 

Tenemos la seguridad: “La oración eficaz del justo puede mucho” [el justo es el que practica la justicia, el que actúa con honradez, el que no miente a su hermano etc]. (Sat. 5:16). (R. and G. 1908). 

En el padre nuestro tenemos un ejemplo perfecto de la petición. ¡Cuán sencilla y sin embargo, cuán abarcante es! Esta oración debería ser enseñada a los niños. Estudien todos cuidadosamente los principios contenidos en ella. 

En respuesta a las oraciones del pueblo de Dios se envían ángeles con bendiciones celestiales. . . 

Mediante la oración y consagración todos pueden relacionarse de tal manera con su Padre celestial que él extenderá sobre bosotros las ricas bendiciones (R.H. 1907).

Luis José de Madariaga.

Maranata

Luis José de Madariaga.

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