sábado, 24 de octubre de 2015

UNA LECCIÓN PARA TENER EN CUENTA


Y dijo: He aquí hay con tus siervo cincuenta varones fuertes; vayan ahora y busquen a tu señor; quizá lo ha levantado el Espíritu de Jehová, y lo ha echado en algún monte o en algún valle. Y él les dijo: No enviéis. 2º Reyes 2:16.

Se cuenta la historia de un niño de cinco años que se perdió. Cayó la noche. Fueron a buscarlo en las cuevas de la montaña que rodeaba el pueblo. Toda la noche nevó, pero el niño no aparecía. Al alba la tormenta de nieve cesó. 

Los miembros de la partida de salvamento regresaron a casa para comer y planifica la estrategia del día. A corta distancia de la casa el padre del niño estaba recogiendo leña, y tropezó con lo que parecía un tronco acostado, cubierto de nieve. 

Pero al sacudir la nieve, para sacar el tronco, salió un niño que estaba debajo de una lona llena de nieve y dijo: “¡Papito, por fin te encuentro!”

Podemos sacar una lección de este incidente. Cuando buscamos lo que está perdido, con toda probabilidad lo hallaremos. 

Amenos que se encuentre en nuestro sendero.Los hijo de los profetas querían buscar a Elías con toda buena voluntad,pero él no estaba perdido. Pensaban que el Espíritu de Dios lo había echado en algún lugar. 

Pero el Espíritu de Dios no echa ni pierde a nadie. Nosotros podemos apartarnos de él, pero él nunca se apartará de nosotros por su cuenta. Eliseo trató de dialogar con ellos, pero los hijos de los profetas insistieron. 

El sabía lo que le había acontecido a Elías. Naturalmente Eliseo les dejo ir, para que comprobarse por su propio medios que no estaba Elías. 

El hijo prodigo era como los profetas. Ningún consejo que el padre le diera pudo disuadirlo de seguir sus propios deseos. Como los hijos de los profetas no llego a ninguna parte. 

Así ocurre con nuestros hijos que quieren tener su propia libertad y hacer su propia voluntad, y no ven el problema hasta que esta encima de ellos. ¿Desean buscar aquello que no está? 

Estos jóvenes llevan la de perder, no se dan cuenta hasta que tienen una edad avanzada, pero ya no hay remedio, si para Dios. 

El Espíritu de Dios los busca, si el joven responde, le concederá su Espíritu y los guiara a aguas de bonanza. El Espíritu de Dios no esta perdido. Vosotros lo hallaréis donde lo dejaste.
Maranata
Luis José de Madariaga.
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
ttp:// segunda venida apocalíptica.
La Biblia a través del tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario