Uno de los problemas
de la “pertinencia” es la tentación que nos asalta de predicar
acerca de las cosas que las multitudes consideran importante en
lugar de anunciar lo que Dios considera importante.
Juan el Bautista era
una voz que clamaba en el desierto y en el palacio de Herodes para
pedir su liberación. El vocero de Dios no tenia miedo a la
persecución. Pablo esta pensando en la apostasía que muy pronto
vendría en su tiempo, pero mirando al futuro contemplaba la gran
apostasía, que pronto se desarrollaría en ambos periodo de la
iglesia, ya que continuaría hasta la segunda venida de Cristo. (Mat.
24:23-27; Hech. 20:28-31; 2º Tes. 2:1-12; 1º Tim. 4:1-3; 2º Tim.
3:1-5).
La verdad es lo
único que da vigor y vitalidad al cristiano. Es por eso que unos de
los grandes problemas que nos enfrentamos hoy día es a las grandes
“conversiones” en masa. Por qué por una puesta entra y salen por
la otra. ¿Cual es el problema? El problema esta en que usamos
métodos evangélicos, y dejamos los nuestro aparcados.
Queremos masas de
conversiones, pero no calidad de creyentes, que puedan representar
bien el carácter de Cristo. Esta profetizado, entraran mucha paja
pero poco trigo.
El mundo quiere escuchar cosas agradables, bonitas, pero no se quieren comprometer con la verdad. Mucho serán los llamados pero poco serán escogidos.
El mundo quiere escuchar cosas agradables, bonitas, pero no se quieren comprometer con la verdad. Mucho serán los llamados pero poco serán escogidos.
El mundo quiere
cosas sencillas, no grandes teólogos, o grandes predicaciones, que
en vea de mover el corazón mueve los asientos. Se habla poco de las grandes profecías,se habla poco de la segunda venida de Cristo, se habla poco del espíritu de profecía. Lo que escuchamos desde los púlpitos son “mensajes lay”, mensajes que no avivan el corazón del cristiano. Aunque para alguno dicen que estos no es cierto. Iglesias casi bacias ¿por qué?
El elemento
“pertinente” del Evangelio es la cruz de Cristo. Pero el mundo no
quiere saber nada de Cristo ni de su venida. ¿Por qué? No sera que
nuestras predicaciones están vacías de contenido. Pero afuera en
el llamado mundo capitalista hay hombre y mujeres que están deseando
beber agua pura y cristalina de la palabra de Dios.
Pero por desgracia
la cruz sigue siendo un insensato tropezadero para algunos, pero para
otros es el agua viva. No podemos cambiar nuestro mensaje, no
copiemos de los demás, seamos íntegros, tenemos que dar un mensaje
de amonestación al mundo, decir lo que va a pasar antes de la venida
de Cristo.
El cristiano que
ora, estudia y depende diariamente de Dios, es una persona
“pertinente”. El hombre lleno de poder el Espíritu Santo, que
presenta a Cristo crucificado en forma sencilla, clara y directa, es
el hombre de hoy día. Hechos y palabras devén de ir de la mano. En
mi vida de cristiano e conocido a hombres y mujeres que poseían un
don de predicación asombrosas, pero sus hecho dejaban mucho que
desear.
No olvidemos esto:
La persona que visita a sus vecinos, oran por ellos e interceden por
sus almas, es la más pertinente en el mundo de hoy. Lograr que
Cristo resulte real y convincente para tu vecina, amigo o conocido,
requiere que el Señor reine en tu corazón. Sólo de ese modo
podremos llegar a las almas.
Maranata
Oren
por la vista de mi esposa, solo ve de un ojo.
Luis
José de Madariaga.
La
Biblia a través del tiempo.
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segunda venida apocalíptica
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