EL SEGURO DE LA VIDA ETERNA.

Estas cosas he escrito a vosotros que creéis en el Nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el Nombre del Hijo de Dios. 1º Juan 5:13.

El propósito de la carta que escribe juan a sus hijos espirituales es el amor. Es una exhortación sencilla espiritual y profunda. Es el amor que hay en el de Jesucristo, que se preocupa de sus hijos espirituales. 

Usted y yo tenemos hijos, y queremos que sigan las huellas de Jesús, y esto nos preocupa. Hay hijos que se marchan de casa para vivir su propia vida, y disfrutar de las aventuras de la vida. 

Esto a los padres nos angustia, y elevamos nuestras oraciones ante el trono Celestial. Creo firmemente, que todas las oraciones de una madre, de un padre por su hijo/a Dios las tiene en cuenta y no las deja en el olvido. 

 Esta historia comienza en un país muy lejano. Cuatro niños que van juntos a la escuela, se hacen mayores.Uno se casa, tiene dos hijos. 

El siguiente amigo se casa. El tercero no quiere saber nada de la Biblia, y su madre ora todos los días por el. 

El cuarto se marcha a una país alejado de sus padres. 

El padre temía ya eso, y todas las noches oraba por el muy de madrugada. Sus lagrimas caían por sus ojos como si fuera cascadas, día tras día el hombre ya de edad oraba por su hijo. 

Un buen día, leyendo un libro, encontró una cita que decía: Dios nunca dejara un alma caída, y en aquel tiempo el Señor le llamara. Desde entonces cuando el padre ora por su hijo, le da las gracias a Dios, porque sabe que lo llamara. 

Dios nunca se olvida de sus hijos. “Con amor te he amado” Yo como padre, se con certeza absoluta que Dios culpara su palabra. Juan ve el problema como un padre amante y se preocupa de sus hijos espirituales, así como nosotros. 

No debemos condenar a nuestros hijos por que se marches, debemos animarlos a que sigan a Jesús que murió por el. Nuestros hijos son justificados por Cristo, y El derramo su sangre por ellos. No somos quienes para juzgar sus actos, son hijos pródigos, y debemos de ayudarlos. 

Ellos tienen en un rincón de su corazón a Cristo, y mientras que Cristo este allí todo ira bien. “Tener al Hijo” es una experiencia personal 31 que en un momento determinado, crecerá y adra fruto a 100% por uno. 

Madres y Padres, sigamos orando por nuestros hijos, y ayudemos lo en todo lo que podamos. 

Eso significara la mayor satisfacciones en pensar acerca de nuestros hijos. Una madre durante toda su vida oro por su hijo que volviese a la iglesia, ella murió en el Señor. 

Dos años después su hijo se bautizo y entrego su corazón a Cristo. La oración de esa madre fue contestada, ella no la vio, pero Dios la tuvo en cuenta. 
Sigamos orando por nuestros hijos este año, al siguiente y así sucesiva mente, sabiendo que Dios las tiene en cuenta. Amen.

[Gracias por buestras oraciones, estoy bastante bien de los picores, aunque es proceso es lento, aun que espero con la ayuda de Dios se me corija. No se vuestras creencias, pero se que Dios os escucha. Ruego a Dios que os de su bendición. Gracias por todo].
Maranata.
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