domingo, 28 de junio de 2015

HAY MOMENTOS PARA HABLAR Y MOMENTOS PARA CALLAR.


Los alguaciles vinieron a los principales sacerdotes y a los fariseos;y a éstos les dijeron: ¿por qué no le habéis traído? Los alguaciles respondieron: ¡jamás hombre alguno ha hablado como este hombre! Juan 7:45,46.


Los miembros el sanedrín estaban muy indignados por la derrota de su plan de arrestar a Jesús. ¡Que testimonio! “¡Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre!” 

Esos aguaciles habían sido enviados para llevarse a Jesús. Como humanos tenemos una idea muy baga de como hablaba Jesús. La acción y la voz, la expresión y las articulación son cosas que deben ser vistas y oídas para ser apreciadas. 

¿Que diferencia de nosotros en nuestra manera de hablar?
Esos aguaciles habían sido enviados para llevarse a Jesús.  Los aguaciles creían que Jesús era un sedicioso, por lo tanto el arresto era legal, ellos solo cumplían las ordenes del Sacerdote. 

Estos hombre se detuvieron para escuchar a Jesús, tal fue la elocuencia de su discurso que después de escuchar a Jesús Todos quedaron convencidos de que no había que arrestarlo. 

Posiblemente pensaron que después de informar sobre lo que Jesús enseñaba, los dirigentes judíos cambiarían de actitud y aceptarían a Jesús como un gran maestro.


Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre”. ¿Como hablaba Jesús? ¿Que dijo que tanto impresionó a a los aguaciles? Jesús hablaba con autoridad. Era representante de Dios en la tierra y ante los hombres, la autoridad divina taba presente en cada una de sus frases. 

Sus palabras eran espirituales que llegaban al corazón más duro de los hombre, y al más sencillos de ellos. Su mensaje era directo, ya que dependía la salvación del hombre, era un mensaje celestial. 

Cuando su palabras salían de sus labios era un Bálsamo para las almas,ya que procedía del Padre celestial.Era un orador elocuente que tenía un gran tesoro de conocimiento celestial para dar a todos los que quisieran oírlo. 

Los secretos de Dios y de su universo eran suyos y podía revelarlos si la ocasión lo justificaba. Hablaba con el poder del cielo para transmitir al hombre lo que Dios tenia preparado para el. Su voz era bondadosa, gentil, convincente llena de amor celestial.

¡Igual que los hijos de Dios! Nuestra manera de hablar debería de ser como la de Jesús, yo el primero. Pero cual lejos estamos de ello. 
Debemos de dar ejemplo al mundo de que somos hijos de Dios, en nuestra manera de hablar, de comportarnos, pero ¡cual lejos estamos de imitar a nuestro Dios!. 

Nosotros nunca llegaremos a hablar como Jesús habló, pero debemos dar testimonio como él lo dio. Con su Espíritu que nos guía podemos dar y hablar del mensaje de salvación. 

Nuestros hechos y palabras deben ir a la paz de la palabra de Dios. 

El poder del cielo será nuestro a medida que nos rendimos al Espíritu de Dios. El esta deseoso de usarno hoy, ¡A que esperas!
Maranata
Sigan orando por la vista de mi esposa.
Luis José de Madariaga.
http:// segunda venida apocalíptica
La Biblia a través del tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario