Sabed que Jehová vuestro Dios no arrojará más
a estas naciones delante de vosotros, sino que os será por lazo, por
tropiezo, por azote para vuestro costados y por espinas para vuestros
ojos, hasta que perezcáis de esta buena tierra que Jehová vuestro
Dios os ha dado. Josue 23:13.Los lazos y los tropiezos suelen venir por aquellos que creemos que son amigos. La idea que se plantea en el texto es el resultado final del mal y quedan encubierto para que puedan verse bien. La sociedad corrupta es insidiosa en sus atracciones.
En primer lugar se ponen los lazos y los tropiezos, y luego solo cuando la victima está entrampada aparecen los azotes y las espinas. Los hombre corruptos descarrían a los hombre puros con engaños.
Esto es lo que le paso a Israel de Antaño, se emparentaron con el mundo y con las cosas del mundo. Una cosa estar en el mundo, pero no participar de las cosas del mundo. Josue advierte al pueblo de antaño y por ende a nosotros.
Los azotes y los castigos sirven para que estemos bien despiertos y no nos alejemos de Dios. Pero una vez que hemos caído en el lazo seremos esclavo como lo es el buey bajo el yugo.
Las espinas en el ojo s un símbolo de una
ceguera, ya que una espina en el ojo ciega a la persona, aparte del
dolor que esta recibe. El mensaje a laodicea es el mismo que se le dio a Israel antes de entra a Canaan. (ver imagen)
Si el enemigo cegó el entendimiento del pueblo de Dios mediante la idolatría, ¿Como cegara el entendimiento al pueblo de Dios hoy día? Siglo nuevo, métodos nuevos.
Pero el sistema es el mismo, con diferentes nombre o métodos. Hoy como en el antiguo Israel se concentra matrimonios con personas que no comparte nuestra fe, las consecuencias no se hace esperar. A lo largo de mi vida, e visto muchos matrimonios desechos por no hacer caso a las advertencias y amonestaciones de Dios,ellos quedan atrapados en sus propio descuido.
Dios retiraría la protección y su presencia -su Espíritu – de ellos y dejaría que sufrieran las consecuencias de su descuido. Las lecciones para nosotros son obvias. Pero no escarmentamos en cabeza ajena. Nuestros hijos se casan con mujeres del mundo, en su gran mayoría el hombre o la mujer terminan en fracaso, no hay regla sin excepción. Lo malo es que echamos la culpa a Dios.
Mientra somos obedientes a él, sus
promesas son seguras. Si aceptamos los caminos del mundo, si somos
descuidados y nos apartamos de él, comprometemos nuestro futuro. Un
pájaro silvestre atrapado en una trampa no canta. Su futuro es estar
en una jaula. [ahora imaginaros una corona de espinas en la sien de Jesús]. ¿Que dolor produciría?. Así también los que están presos en las trampas de Satanás.
No “cantan” las alabanzas de nuestro Dios. Se convierten en prisioneros, aunque aparentemente tengan libertad efímera. Pero la gracia no esta todavía cerrada las puertas de la gracia siguen abiertas para sus hijos. Todavía su Espíritu nos insta a andar en su camino La decisión es tuya. (¿)
Maranata
Sigan
orando por la vista de mi esposa.
Luis
José de Madariaga.
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segunda venida apocalíptica
La
Biblia a través del tiempo.
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