jueves, 16 de julio de 2015

DIOS REFINA AL HOMBRE


Porque Juan bautizó con agua, más vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días. Hech. 1:5.
Una otra vez, especialmente en los días finales de su ministerio, Jesús prometió que el Espíritu Santo tomaría su lugar, y ocuparía su ministerio. Su ministerio había concluido. 

Había gustado la muerte. Había pasado por la tumba.
Había resucitado. Ahora estaba prometiendo a los discípulos el mayor don que el cielo pudiera conceder al hombre: el bautismo del Espíritu Santo. 

Este don no seria concedido a los que no aceptaran a Cristo como su Salvador, y aceptaran su sacrificio expiatorio de Cristo. Este es en términos globales porque los árabes y los judíos no serán salvos, otra cosa sera la individualidad de las personas ante Dios.
 ¡El bautismo del Espíritu Santo! ¿Que significa? ¿Que hace? 

Sabemos que es el bautismo con agua que significa que el hombre se tiene que hundir y ser cubierto totalmente de agua. Es el símbolo e la muerte del pecado.

La purificación, y la vida nueva en Cristo. El bautismo del Espíritu Santo también significa una inmersión completa en el Espíritu Santo. Es un cambio de pensamientos ideas y conceptos erróneos. 

Cuando el Espíritu Santo toca al creyente que ha nacido de nuevo, le toca en todo su cuerpo, mente y corazón, todo el ser queda inundado por el poder del Espíritu Santo.
Ciertamente las manos, pies , cuerpo , cabeza y corazón, sirven o debería servir a los propósitos de Dios. 

En algunos les causa indiferencia, no lo comprende porque su mente no esta inundado del Espíritu y hacen las cosas que le agradan a su cuerpo y a su mente.

La gran labor del Espíritu Santo cuando somos bautizados es hacer un cambio en nuestra alimentación, en nuestra forma de vivir, es decir: Transforma nuestra vida. Primero somo purificados. David pidió un corazón puro, cuando decimos corazón nos referimos a la mente.

El Espíritu nos refina, nos educa, instruye al que no sabe leer, o expresarse, el tosco corazón es ablandado, moldea y lo vuelve bondadoso, amable. El bautismo del Espíritu Santo llena nuestras vidas pecaminosas, y en su lugar somos iluminados.

El resplandor de Cristo brilla en nuestro sery nosotros alumbramos l sendero hacia la cruz para que otros lleguen a la cruz y sean salvos.

”El Espíritu Santo se da como agente regenerador, para hacer efectiva la salvación obrada por la muerte de nuestro Redentor”. (H. A. p. 43). 

La refinación comienza en el momento en que recibimos a Jesús. Se efectuara la regeneración y nos convertiremos en nuevas criaturas en Cristo Jesús.
Maranata
Sigan orando por la vista de mi esposa.
Luis José de Madariaga.
http:// segunda venida apocalíptica
La Biblia a través del tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario