Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús. (Felipenses. 2:5).Estas palabras de Pablo forman la introducción para que la iglesia de los Filipenses vean su necesidad de unidad y de una humildad abnegada, ya que era una cualidad esencial en el camino cristiano. En vosotros. O "entre vosotros" Pablo quiere destacar el elemento divino (Cristo) ante el elemento humano (Jesús) en la naturaleza divino-humano del Salvador.(foto. Hombre que murieron por su fe).
Pablo va espontániamente de la preexistencia a la encarnación y de la humillación a la exaltación, en una forma que realmente infunde a su propósito pastoral un poder eterno. Para Pablo toda vida espiritual se centra en Cristo, y cuando desea transmitir lecciones de humanidad y de unidad no puede encontrar un mejor método que presentar en forma resumida la vida de su Maestro, como ejemplo supremo de las virtudes que desean que posean los Filipenses, y por ende nosotros los cristianos.
En los versos (2:6-8) Pablo no se ocupa conscientemente de la teología en un sentido estrictamente académico, sino que manifiesta la comprensión inspirada e intima de la obra redentora de Cristo que tenía el apóstol. Por supuesto, esto no significa que no existe reglas que seguir o leyes que obedecer.
El cristianismo no carece de obligaciones morales, como infieren los que no desean obedecer la ley. (de los diez mandamientos) No ha habido cambios ninguno con respecto a este asunto.
No obstante, el camino cristiano no esta constituido por conjunto de leyes y reglamentos. Apartándose de los principios del pacto eterno, el judaísmo intentó glorificar las leyes. Como resultado naufragaron y en sus desesperado legalismo. (Es lo que estamos viendo hoy en el mundo cristiano, un legalismo total). No existen leyes para cada situación que se presenta. El cristiano es un dinámico sustituto del pecado.
Los Filipenses estaban pasando por un momento critico de unidad, se había introducido disensiones en sus filas, como las que puede haber hoy en día en las iglesias. Pablo no basaba su exhortación en la lealtad personal de ellos hacia él como su padre espiritual, sino en la lealtad hacia Dios como su redentor. En mi experiencia cristiana, y en los años de estudiante de teología, e conocido a muchas personas que an puesto a sus pastores como si fuera Dios, lo que ellos decían eran ley. Y vi como pastores cayeron como higos ya maduros.
Ese sentir que habla Pablo, es un sentir es segun Cristo Jesús. Cristo es nuestro modelo, porque Pablo estaba seguro que el ejemplo de Uno sin pecado podía ser más eficaz que un millar de preceptos, de leyes y estatutos. De pequeño mi madre me decían, hijo tienes que ser como Juan junípero, fiel a Dios sobre todo, y fiel a tu pueblo, y así sabrán la gente a que Dios honrrar y sirves. Tal debe ser tu ejemplo, que cuando Dios te llame, te diga: buen siervo me as sido, todo esto es parati. (foto. Hombre y mujeres que hiciero de la palabra su espada).
Un sentir semejante al de Cristo no destruye la obediencia, Con él habrá perfecta obediencia, perfecta humildad y y verdadera exaltación.
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