martes, 25 de febrero de 2014

CUANDO EL TRIGO ESTA MADURO.

Y cuando el fruto esta maduro, se siega se mete la hoz, porque la siega ha llegado. (Marc. 4:299.  

Este verso hace alusión a Mat, 3:12. El aventador es muy típico en los países mediteraneos y orientales. Cuando yo era niño, iba a trillar en la era con mi tío en cima del trillo tirados por dos mulas, dábamos vueltas y más vueltas al rededor del trigo. Recuerdo que mi tía con la orca aventaba la paja y el grano quedaba en el suelo. Después limpiamos la era, dejándola preparada para el día siguiente. (foto Trillando la era).

Tanto Mateo como Marcos quieren dejar muy claro el significado de lo que dijo Jesús.  Hay una intima relación entre la condición espíritual de la iglesia, y la terminación de la obra y el regreso de nuestro Señor Jesucristo. Cierto es que también tiene un paralelismo con el testo mencionado.

Limpiar la era. El griego emplea el verbo diakatharizo, "limpiar", y recoger el trigo, sinvoliza la separación de los justos y de los impíos  se realizara al "fin del siglo". "Cuando el carácter de Cristo sea perfectamente reproducido en su pueblo, entonces vendrá él para reclamarlos como suyos" (P.V.G. p.52; 

A esto se refería Jesús en su palábola del trigo, la espiga y el grano lleno.  El fruto aludido en la parábola se refiere a los frutos del Espíritu.  "El fruto del Espíritu es: caridad, gozo, paz,tolerancia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templaza. (GAL. 5:22,23).

Este fruto nunca puede perecer, sino que producirá una cosecha, según su género, para vida eterna"  (Ibid).  "La siega es el fin del siglo" [el fin del mundo].  En nuestro testo de hoy Jesús dice: " Cuando los frutos del Espíritu madure en la vida del pueblo, aplicaré inmediatamente la hoz en ocasión de mi segunda venida, porque la cosecha [el fin del mundo] ha llegado". Es decir: Cuando mi pueblo refleje mi carácter, vendré a reclamar lo que es de mi propiedad".

Estamos en pleno siglo XXI, los acontecimientos que estamos viendo por la T.V. nos asusta, cada día hay más violencia, más desastres, más guerras, más inseguridad, y más dictaduras.  Hay un temor en el ser humano, que no puede expresar, sabe que va a ocurrir algo, pero no sabe cuando.

Creo que hay algo más: no sólo hay un mensaje que anunciar al mundo; también hay un carácter que perfeccionar: el tuyo y el mio.  Pero mientras aya envidias, rencores, adulterios etc. esto no se podrá conseguir, abremos fracasado y otros ocuparan nuestro lugar.

El mensaje del pueblo de Dios, que guarda los mandamientos establecidos por Dios, y que tiene el testimonio de Jesucristo debe llegar a los confines de la tierra, inclusivamente  al todo Oriente y África.  Existen tribus en el Amazonia que no saben lo que va a ocurrir, aunque ellos lo presienten por la naturaleza.

El mensaje del tercer ángel no solo debe conseguir observadores del sábado en todo el mundo, sino que deben reproducir el carácter del Señor Jesús en sus corazones.  La obra de Cristo debe terminar en nosotros, debemos de dejar muchas cosas en este mundo, si queremos estar en la tierra nueva. 

No necesitamos temer porque "cuando el carácter de Cristo sea perfecionado perfectamente en nosotros, en su pueblo, entonces él vendra en las nuves.  Maranata.

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