TENED PACIENCIA LOS UNOS CON LOS OTROS.

Sobrellevar los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo . Gál. 6:2

El “peso”, “carga”. Es la regla de oro (Mat. 7:12). Exige que cada seguidor de Cristo considere los problemas de otros como si fuera suyos. 

A finales del siglo XIX y principios del XX, en una Biblia había una ilustración, donde un grupo de personas pasaban por un desfiladero muy pronunciado. 

Estas personas llevaban un gran bulto en la espalda. Y cada una ayudaba a sostener la carga del que iba delante. Cada uno cuidaba de su compañero. 

Esto me recuerda hace muchos años, cuando escalaba con mis compañeros una montaña, teníamos que cuidarnos unos a otros, con el riesgo constante de caer al vacío. 

La aplicación de este principio es la relaciones personales, en que debe de existir entre los hijos de Dios y la iglesia, y en una escala nacional e internacional, esto resolvería los males que hay en el mundo. 

Cada uno de los hijos de Dios, va subiendo por una montaña muy escarpada, pero con la ayuda y ánimo de su compañero, el camino se hace más corto. 

La gracia de Cristo es lo único que hace posible aplicar este principio en todas las circunstancias (Mat. 5:43-47). 

La ley es el principio que motivaba la vida de Cristo era llevar las cargas del los hombres (Isa.53:6). Pero un cristiano cínico podría decir: 

“¿Por qué no dejar que cada uno lleve su carga?”. La vida puede resultar una experiencia sumamente solitaria. 

El único “mandamiento” mencionado como tal, que nuestro Señor dio a sus discípulos mientras estuvo en la tierra, fue que se amaran “unos a otros” (Jun 13:34). 

Esto incluye que debemos amar a los demás desfavorecidos de la sociedad. La voluntad revelada de Dios esta basada en amar a Dios y el amor hacía el prójimo. 

Muchos cristianos se basan en guardar la ley como los fariseos, y dejan los más importante, ayudar a su prójimo. Pablo escribió a los romanos que el amor es el cumplimiento de la ley (cap. 13:10). 

Pero sin dejar de guardar la ley. Esto significa una forma de vivir la ley según la interpretó Jesús esta consiste en ayudar a nuestro prójimo a llevar sus cargas. 

Mientras los fariseos colocaban sobre los hombres cargas que éstos no podían llevar, Jesús explicó que él había venido a “dar buenas nuevas a los pobres. . . a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad. . . (Luc.4:18). 

La ley del amor anunciada por Cristo nos pide que aliviemos las cargas de aquellos que sufren, los que están cerca de nosotros. Esta ley demuestra que Dios ama al hombre.

MARANATA.

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