lunes, 18 de enero de 2021

"TÚ QUE HABLAS DE DIOS" CONFIA EN DIOS.

En Dios solamente está acallada mi alma; de El viene mi salvación.Sólo El es mi Roca, y mi salvación; es mi refugio, no resbalare mucho. Sal.62:1-2,5 up.

La meditación nos conduce al amor y a la comunión con Dios. El salmista espera en Dios porque sabe que en El tienen esperanza, y que le dará suficiente sabiduría para llevar acabo sus proyectos. 

El salmista sabe que la única sabiduría proviene de Dios. Ni las ciencias ni las letras dan sabiduría al hombre para conoce las cosas eternas. 

Cuando un cristiano esta agotado por los problemas de esta vida, sabe como el salmista que en el silencio de su alma, puede encontrar a Dios.Es decir, “en Dios sólo puedo encontrar el remedio a mi males, y tener tranquilidad en mi alma”. 

Si el salmista esta tranquilo y haya la paz en su interior, es porque ha dejado todo en manos de Dios. 

El salmista observa que no sólo hay paz en su corazón sino confianza, aun en no resbalara por qué su confianza esta puesta en El. 

Contempla el gran amor, mientras medita en el gran sacrificio que ha hecho a nuestro favor afín de que creyéramos en él. 

Al igual que el corazón del salmista se llenaba de gozo, y sentía una paz e indescriptible de esperanza, 

así el cristiano puede sentir lo mismo a depositar su confianza en Dios y en Cristo. 

Tenemos ejemplos de muy presente de la reforma en Europa, el reformador Zuinglio, decía: “No reconozco otra norma de juicio que la palabra de Dios” 

“La paz tienen su habitación en nuestro pueblo----y no hay disputas, ni hipocresías, ni envidias, ni escándalos. 

¿De dónde puede venir tal unión sino del Señor y de la doctrina que enseñamos, la cual nos colma de los frutos de la piedad y de la paz?” CS. p. 193. 

La palabra era la base para conocer al Dios vivo, la cual nos hace estar tranquilos en su paz. 

Mientras oramos en nuestra pieza, o cuarto, podemos disfrutar de ricas bendiciones y creer plenamente que somos suyos por adopción, y por redención. 

Esto creyó el salmista, y por eso su alma estaba tranquila. Para cada uno de nosotros Dios tiene reservadas muchas cosas; per no permitamos que la impaciencia ciegue nuestra vista. 

Las bendiciones están delante de nosotros, requiere oración y ayuno. 

En la naturaleza lo vemos cada año, viene el invierno y luego la primavera. 

En el espacio vemos lo mismo, cada segundo hay una estrella que nace y el universo es cada día más vello. 

No dejemos que esta pandemia, nos aleje de Dios. El esta en el control, tu misión es acercarte a él. 

Sí, los arboles saben esperar el momento de esplendor. De la misma manera nosotros debemos aprender a esperar y confiar en Dios. 

MARANATA.

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NOTIFICACION A LOS LECTORES.

Notificación: Estimados lectores de este blog. Oren mi salud y por este proyecto Sal. 62: 7 (a través de https:// se puede ver estos blog) El día 1 de febrero dejare de emitir este blog, por causa de mi operación de la vista.

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