Y David fue angustiado, porque el pueblo hablaba de apedrearlo; porque todo el pueblo estaba con ánimo amargo, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se esforzó en Jehová su Dios. 1º Samuel. 30:6.
Do todas las vicisitudes que David paso, una de las más dolorosas fue el rapto de su familia y los del pueblo de Siclag por los amalecitas.
Se esforzó para no gritar de dolor oh se esforzó y suplicar a Dios, esta ación de humildad de buscar a su Dios fue de las cosas más savias que hizo Davis.
Recibió la aprobación que obtendría la protección de Dios en esta empresa. A través de la vida de David, vemos altos y bajos como cualquier de nosotros.
Se “fortaleció” en Jehová para la intervención que iba a llevar contra los amalecitas y gente monada que no tenían escrúpulos de matar y de hacer esclavos.
Estos hombres se dirigieron hacia el Neguev de los cereteos, eran hombre como los amalecitas beduinos y sin compasión. David contaba con la aprobación de Dios para impartir justicia.
Dios usa elementos tanto humanos como naturales para advertir al hombre de su pecado y de sus malas acciones. Tenemos ejemplos en la Biblia, Israel se desvió del camino de Dios, y fue destruido.
Sólo quedo la tribu de Judá y Benjamin, lo que hoy se compone la actual Israel.Pensemos por un momento el día lóbrego que paso David. Si cree usted que tiene dificultades, imagínate lo que sería para usted experimentar lo que David paso.
Encontró su casa en ruinas, toda su familia cautiva y muchos hombres muertos. Imagínese que un tornado se lleva su casa, sus cosechas, y todo lo que tiene es una amargura y una impotencia terrible.
Esto es lo que experimento David, una impotencia terrible. 25 Pero aquí se nos presente un valiente lienzo de David. Se nos dice que él “se esforzó en Jehová su Dios”.
No se conformó con una teoría, una idea, o algún proverbio iluso. Fue directamente al mismo Dios. Allí encontró el consuelo y la dirección de lo que se debía hacer.
Encontró la paz, la fortaleza, y el consejo de Dios de lo que tenía que hacer. El cristiano puede hacer lo mismo que David. Vivimos en momentos angustiosos, Mateo 24:21 pero Dios no abandonara a sus escogidos.
Dios siempre esta más cerca cuando estamos angustiados. Nuestra misma necesidad por él enfoca mejor su presencia, y en realidad el momento cuando sentimos que estamos en lo más bajo de la “escalera” puede transformarse en la hora más gloriosa de nuestra vida.
Eso se debe a que entonces podemos aprender a conocer a Dios cómo un amigo que esta a nuestro lado cuando más lo necesitamos.
MARANATA.
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