HIJOS DEL REY CELESTIAL

En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mi mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. Juan. 14:2,3.

Dios nos hace una invitación: “Por lo cual, salid de en medio de ellos y apartaos. . . Y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso” (2 Cor. 6:17,18). 

¡Oh, qué exaltado privilegio es este -ser miembro de la familia real, hijos del Rey celestial! ¡ Que el Salvador del universo, es el Rey de reyes, sepa nuestro nombre, y que seamos herederos de Dios de la heredad inmortal, la realidad eternal! 

Este es nuestro privilegio; ¿obtendremos el precioso galardón? ¿Liberaremos la batalla del Señor? ¿Seremos triunfadores? ¡Muchos dicen: hay tiempo para cambiar! El tiempo esta (?). Todo depende de ti. 

Escudriñar las escrituras parque ellas son la que hablan de mi (Jesús). Deseo que leáis la Biblia y veáis los incomparables encantos de Jesús. Deseo que quedéis prendidos del Hombre del Calvario, a fin de que a cada paso podáis salir al mundo: “Sus caminos son caminos de rectitud y deleitosos, y todas sus veredas paz” (Prov. 3:17). 

Todos debemos de representar a Cristo ante el mundo. Y solo hay un medio. Nuestro ejemplo, nuestra manera de hablar, y nuestro testimonio. Debemos mostrar al mundo que tenemos una gran esperanza en la inmortalidad de Cristo y que a través de él tenemos la nuestra. Debemos hacer todo lo posible para que los ángeles estén en nuestra morada. 

Y hacer que Cristo habite en nuestro hogar. 23 ¡Alaba alma mía, al Señor! ¡A lavemos su Santo Nombre! Con cánticos de alabanza! El nos dijo que fue a preparar mansiones para sus hijos. “No se turbe tu corazón; creéis en Dios, creed también en mi. 

En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis” (Juan. 14:1-3) Manuscrito.80. 1886. [El nuevo correo para que mandéis vuestras experiencias de vuestra conversión a Cristo es: lospilaresdeluniverso@gemail.com]
Maranata.
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