Santiago resume las diversas
admoniciones acerca de la lealtad indivisa frente a la voluntad de
Dios.
La falta de humildad es una fea deficiencia del ser humano.
La falta de humildad es una fea deficiencia del ser humano.
En
la deplorable realidad de la condición personal del ser humano lo
induce a humillarse delante de Dio.
Pero la realidad es mejor no saber cuándo se posee esta cualidad, porque tan pronto como uno se da cuenta de su presencia, ésta se desvanece y ya no se la posee.
Pero la realidad es mejor no saber cuándo se posee esta cualidad, porque tan pronto como uno se da cuenta de su presencia, ésta se desvanece y ya no se la posee.
Dios siempre esta dispuesto a perdonar. (Ver Isa. 57:15). La
humillación ante él Señor del Universo de los “humildes” no se
disfraza con una falsa modestia para ser vistos por los hombres.
Ni
los actos externos ni los motivos íntimos están ocultos por el
señor (2º Crón 16:9; Heb. 4:13).
El pecado es en primer lugar contra Dios, no importa cuál haya sido su naturaleza ni quién haya sido perjudicado por él.
El pecado es en primer lugar contra Dios, no importa cuál haya sido su naturaleza ni quién haya sido perjudicado por él.
“La humildad que se ve a sí misma no es
verdadera humildad; porque la humildad es un ojo que ve todo menos a
sí misma”.¿Cómo podemos controlar nuestros progreso en la senda
de la humildad?
¿Cómo reaccionamos, por ejemplo a la oposición
cuando parece bloqueado el camino a la realización de un plan
acariciado? ¿Nos molestamos e irritamos o continuamos nuestro curso
con humildad y confianza en Dios?
¿Cómo llevamos el éxito? El
éxito parece inaplicable a la humildad; Cuando somos a lavados
porque hemos hecho un buen culto otra actividad. Lincoln dijo acerca
de Dr. Hofstader, de la universidad de Columbia, “es que fue
purificado y no intoxicado por el poder”.
El hombre que carece de
humildad no puede resistir la tentación del éxito y el poder, sino
que se vuelve más egoísta, fanático y opresor con su progreso y
éxito.
Los “humildes” serán ensalzados por Dios en esta vida
hasta cierto limite, pero lo serán más plenamente en la vida
venidera.
El Señor es quien hace “vivir el espíritu de los
humildes”. Al igual que Jonatán y Juan el Bautista (ED 151), los
“que por su anegación han comprendido los sufrimientos de Cristo”
recibirán la recompensa de la honra eterna.
Solamente un hombre
humilde llega a ser un mayordomo de la gracia divina. El que esta
dispuesto a ser enseñado por Dios y confíe en la conducción
divina, y nunca será desechado.
Finalmente, ¿cuál es nuestra
relación con la oración? ¿Creemos que podemos vivir sin Dios?
¿Nos parece que nuestro camino es mejor que el suyo?
¿Nos parece que nuestro camino es mejor que el suyo?
El orgullo supremo
no pide a Dios perdón, su vanidad y su exaltación propia se lo
impide. Veámonos hoy cuál es nuestra condición, y miremos a Cristo.
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.bslogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda
venida apocalíptica
http://viajes
a través del tiempo y del espacio
NOTIFICACION A LOS
LECTORES.
Notificación: Estimados lectores
de este blog. Estimados lectores de
este blog. Por mi salud y por este proyecto Sal.
62: 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario