miércoles, 1 de marzo de 2017

TU ERES DE MAYOR VALOR PARA CRISTO.


Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos. Luc. 12:7
Nuestro texto declara el tremendo valor que Dios le da a la humanidad. El hombre es tan importante para Dios que él sabe cuántos cabellos hay en la cabeza de cada uno. 

Sabe el numero de nuestros huesos, y nuestros nervios, nuestros vasos sanguinos, conoce cada musculo y cada tendón de nuestro cuerpo. Ningún proceso de evolución podría producir la coordinación que existe entre las partes del cuerpo humano. 

El celebro del ser humano es superior a cualquier especie en la tierra. Es difícil de igualar. 

El hombre fue creado a la imagen de Dios. La imagen quedo desfigurada cuando Satanás persuadió a Eva y Adán el desobedecer a Dios, y tomar del fruto prohibido. Aunque lleva la cicatriz del pecado, Dios siguió colocando el mayor valor en aquellos que había creado, y prometio redimirlos. 

En el conflicto entre el bien y el mal, la mejor arma de Satanás es levantar dudas en la mente del hombre acerca del plan de Dios para la salvación humana. 
Cuando estamos en dudas, Dios nos invita a usar nuestro cerebro que nos dio. La duda, las hipótesis son sus armas favoritas de Satanás. 

“¡Venid pues, y arguyamos juntos dice Jehová! ¡Aunque vuestros pecados fuesen como la grana, como la nieve será emblanquecidos;
aunque fuesen rojos como el carmesí, como lana blanca quedara!” (Isa. 1:18). ¿Podría haber mayor justicia? Dios tiene poder para borrar al hombre pecados de la faz de la tierra, sin embargo está dispuesto a razonar con nosotros y a hacernos puros y limpios. 

Esta es una promesa que Satanás nunca ha podido ni ha querido hacer. El orgullo y la arrogancia han sido sus compañera de viaje. Jamás Satanás ha ofrecido un plan de salvación. Es un hecho, por el contrario, que Satanás nunca llama la atención hacia el pecado y sus resultados. 

Cuando trató de “razonar” con Cristo en el desierto, sólo pudo tentarlo con las cosas del mundo. Ninguna de ellas podía garantizar la pureza y la salvación. Al igual que hace con nosotros. Al hablar a la muchedumbre, Jesús dijo: “¿No se vende cinco pajarillos por dos cuartos? 
Con todo, ni uno de ellos está olvidado delante de Dios” (Luc. 12:6). El Dios que no olvida al pajarillo no se olvidará del hombre, no importa cuán pecador haya llegado a ser. Durante seis mil años (no miles de años) su Espíritu ha enseñado al hombre los caminos de Dios, revelando sus propósitos y recalcando el valor en que es tenido el hombre. ¿Estamos hoy razonando con él, para que seamos contados entre los redimidos? Su Espíritu nos está hablando hoy. ¿Lo estamos escuchando?
[Espero que me contéis vuestras experiencias con Cristo de buestra conversión. al  correo: cuentatuexperiencia.hotmail.com]
Maranata.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http//lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda venida apocalptica
http://Viajes a través del tiempo y espacio.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario