LA OVEJA PERDIDA.

¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y se se descarría una de ella, ¿no deja las noventa y nueve y va por los montes a buscar la que se había descarriado.Mate. 18:12.
Las parábola de la moneda y de la oveja perdida nos enseña lecciones muy preciosas para nuestra vida. Dios a tomado la iniciativa para efectuar la salvación del hombre. La salvación no consiste en que el hombre busque a Dios, sino en que Dios busca al hombre. 

El razonamiento del hombre no ve en la religión más que intentos humanos por encontrar la paz del alma y resolver el misterio de la existencia, por hallar solución para las dificultades e incertidumbres de la vida. 

La oveja perdida es el hombre, llegado a este punto: Dios puso a su iglesia para busca esa oveja que esta descarriada. Mucho, mucho más sería recuperados si su pueblo trabajara más por las almas. 
Muchos del pueblo de Dios deberían o deberíamos pedid a Dios que nos den la preocupación de abrir las Escrituras para compartirlas cono nuestro amigos o vecinos. Muchos serán rescatados de una forma o de otra, pero la obra debe ser realizada tal como el Señor lo indique. 

Tú tienes un don, no lo pierdas, úsalo para gloria de Dios. En mi casa siempre tenemos libros como el CS. CC. DTG. Y cuando vienen alguien le ofrecemos un libro. Es una obra misionera simple. ¡Cuantos se van de nuestros hogares sin un aliento de esperanza! Muchos. 
 Debemos aprovechar cada oportunidad de nuestra vida para llevar almas a Cristo. 

Debemos de recordar que en las vidas de sus seguidores han de verse la misma devoción, el mismo sometimiento a la obra de Dios ante toda una sociedad atea, y acomodada en sus sofá. 
Debemos de reflejar el carácter misionero de nuestro Maestro. 

Dios demanda de nosotros una labor, una misión, id y as tu lo mismo. El aquel día daremos cuenta a Dios por nuestras oportunidades despreciadas. 
Cada hombre, cada mujer, cada niño, cada anciano; debemos ser pilares en el templo de nuestro Dios. Que nadie permanezca ocioso por que no puede hacer la misma clase de obra que hacen los siervos de Dios. 
Cada uno tenemos una misión, el carpintero con su trabajo, el mecánico con el suyo, el laico con predicar la palabra, y Cristo recogiendo la cosecha. Cada uno puede recoger solo una espiga, otros dos, y otros varias espigas. Pero todos los granos val al granero de Dios. Esta obra puede ser llevada a cabo sólo por los miembros de la iglesia, bajo la dirección del Espíritu Santo.
[Espero que me contéis vuestras experiencias con Cristo de buestro bautismo. cuentametuexperiencia.hotmail.com
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