Así que somos embajadores de
Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en
nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios. 2º Cor. 5:20.
En muchas iglesias cristianas los
dirigentes de la iglesia se siente tentados a veces a promover el
celo religioso con un mero recurso para fortalecer el presupuesto.
Otros dirigentes insta a la congregación a dar grandes donativos,
aveces para su propio beneficio. Esto es muy usual en los Estados
Unidos. Pero la realidad es otra, el mensaje que Cristo nos da es
claro y sencillo.
El embajador debe de ser una persona coherente, una
persona llena de dignidad y experiencia, y por lo tanto investida de
autoridad. A lo largo de mi vida cristiana, e visto cristianos que se
creían con autoridad en la palabra de Dios, lejos de la realidad.
Quieren dar las profecías de una sola vez, y así explica todo lo
concerniente a la venida de Cristo, y lo concerniente a la gran
Babilonia.
Los embajadores de Cristo, son personas humildes, son
hombres y mujeres unidos con Cristo y por su causa. “Porque
nosotros, colaboradores somos de Dios; y vosotros sois labranza de
Dios, edificio de Dios” (1º Cor. 3:9).
Estos hijos de Dios, se
distingue por su fidelidad (1º Cor. 4:1-2; 1º Tim. 1:12),
su celo, su compresión personal de las grandes verdades del Evangelio que conocen por experiencia, y por su diligencia en estudiar, en orar, en ganar almas y en la edificación de la iglesia.
su celo, su compresión personal de las grandes verdades del Evangelio que conocen por experiencia, y por su diligencia en estudiar, en orar, en ganar almas y en la edificación de la iglesia.
No hay mayor dignidad
ni mayor honor que ser embajador de Cristo y del reino del cielo.
Reconocemos que el tema central del Evangelio es “Cristo
reconciliando al mundo a sí”
Los que han sido reconciliados tratan
de expresar el amor divino que hay en su corazón. Sabe que el tiempo
que le queda al hombre es breve, y su misión es proclamar que el
reino de Dios esta cerca.
No es en ningún sentido un sacerdote
intermediario, ¡No! Pues hay “un solo mediador entre Dios y los
hombres, Jesucristo hombre” (1º Tim. 2:5).
Pero con tanto que
hacer y la urgencia de la última hora que nos apremia, todos los
hijos de Dios de buena voluntad deben alistarse en esta cruzada de
evangelizar al mundo que perece.
Otra convicción que mantiene la fe
vigorosa y el amor puro es saber que la iniciativa corresponde a
Dios. La obra de redención es divina.
A nosotros nos toca la gloria
de cooperar en su gran obra; pero debemos refrenar constantemente la
tendencia
humana a rebelarnos contra Dios y tratar de manejarlo para que se avenga a los planes humanos.
humana a rebelarnos contra Dios y tratar de manejarlo para que se avenga a los planes humanos.
Que no seamos dominados por
nuestros impulsos, o por nuestra inteligencia humana. Dios obrara en
nosotros para terminar la proclamación del Evangelio.
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.bslogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda
venida apocalíptica
http://viajes
a través del tiempo y del espacio
NOTIFICACION A LOS
LECTORES.
Notificación: Estimados lectores
de este blog. Oren por mi salud y por este proyecto Sal. 62: 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario