Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en
él crea, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3:16
Juan expresa el amor de Dios mejor que ningún
discípulo. Juan invita a los hombres para que lo “miren” o
“contemplen”. La expresión suprema del amor divino es la dádiva que hizo el Padre a dar a su Hijo.
“Nadie tienen mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos” (Jun 15:13). Este texto no lo entendieron bien el pueblo de Israel.
A lo lardo de su historia, Israel fu rebelde a Dios, y muchas veces fue reprendido por Dios, usando elementos humanos. Corría el año 721, Israel se prostituyo adorando a dioses paganos y violando los derechos de Dios.
El rey Sargón II sitio la ciudad de Samaria, la destruyo y se llevaron sus tesoros. La mayoría de la gente: supo que el dios de Asiria, fue el autor de la conquista y le adoraron en el templo de Nínive.
Esto demostró que el dios de Nínive era más poderoso que el Dios de Israel.
Sargón saqueo el templo y sis tesoros fueron llevados al templo de Sargón.
Esto se consideraba propio y adecuado, siendo que Ashur había prevalecido sobre Israel.
A pesar de las amonestaciones de los profetas , Israel se deslizaba constantemente hacia los pensamientos paganos y considerar a Jehová como un Dios exclusivo, que tenia la responsabilidad de tratarlo mejor que a los otros pueblos y que siempre fueran conquistadores nunca conquistados.
Al igual que ellos cayeron en esa falsa seguridad, nosotros podemos caer en el mismo sentido. Nos vanos tras los baales del siglo XXI. La historia se repite una y otra vez.
Vemos al profeta Amós que se ocupa de este problema dando énfasis al pensamiento de que Jehová es el Dios de todas las naciones.
Amós trata de conducir a su pueblo a una correcta concepción de la verdadera relación con Dios. Israel echo a Dios de su presencia y por eso fue destruida, el Espíritu de Dios se retiro de ella.
Cristo vino para poner cimientos nuevos en Israel Espiritual, y por ende a todo el mundo. El amor de Dios abarca a toda la humanidad, pero beneficia directamente sólo a los que responde a su amor (Jun 1:12).
El amor requiere reciprocidad para ser plenamente efectivo. Pero es significativo que el amor de Dios abarque tanto a los que lo rechazan como a los que lo acepta.
La amonestación a la iglesia de laodicea es una advertencia clara y contundente para el pueblo de Dios.
Si Amós señalo que Dios amaba a todo el mundo.
Eso es también lo que dijo Jesús a un doctor de Israel: “De tal manera amó Dios al mundo” Las infinitas riquezas de su gracia y misericordia son derramadas sin distinción sobre todas las naciones, tribus, lenguas, y pueblos.
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.bslogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda
venida apocalíptica
http://viajes
a través del tiempo y del espacio
NOTIFICACION A LOS
LECTORES.Notificación: Estimados lectores de este blog. Oren por mi salud y por este proyecto Sal. 62: 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario