sábado, 25 de enero de 2020

EL ALTAR EN EL HOGAR.


Confesaos vuestras faltas unos a otros, y rogar los unos por los otros, para que seáis sanados. Lo oración eficaz del justo, puede mucho. Santiago 5:16.

El requisito básico para que un cristiano se acerque a Dios debe haber una fe sincera en la oración. 

Tener una conciencia clara y una relación continua con Dios. 

Se nos advierte que un pecado cometido en secreto se debe de confesar a Dios. Siempre que dicho pecado si es continuado, debería abandonarse para obtener el perdón. 

Los pecados en que se hallen implicados otros, también deben ser confesados a los que han sido ofendidos. Una conciencia culpable es una barrera que impide confiar plenamente en Dios, y desvirtuará la oración. 

Los que estamos enfermos del pecado, deberemos ir aquel que puede sanarnos de esta lacra de pecado. (1º Juan 1:9). 

Sólo tenemos un mediador entre el hombre y Dios sólo Jesucristo (1 Tim. 2:5). 

No son las imágenes de talla, que tienen ojos y no ven, tiene manos y no se mueven, piernas y no caminan. 

Es una estatua fría, con corazón frio, que ni oyen ni sienten. 

Ese es el intercesor del hombre. Es el cuadro que pintaría un pintor, un cuadro frio y sin vida. Cristo es nuestro abogado “con el Padre” (1 Jun 2:1). 

Y él siente cuando sus hijos sufren y parece por el pecado, y el escucha las oraciones elevadas a él. Hoy podemos contemplar en nuestra mente un cuadro vivo, y en medio del lienzo, una familia orando a un Dios que escucha. 

Sus alabanzas a Dios y presentando sus necesidades cada día, se eleva como fragancia de incienso agradable a Dios. El culto familiar es el corazón del cristiano, y lo más maravilloso de el, la comunión con nuestro Dios. 

Y cuando hacemos esto dirimente,
nos sentimos más seguros cada día. De manera que hay ocasiones cuando él debe retener las cosas que consideramos de mayor importancia. 

Entre una vida agitada por el tumulto de la vida, hay momentos en que debemos de meditar y orar en silencio y esperar pacientemente.

Creo con sinceridad que deberíamos aprender, como familia, a adorar juntos cada día, no solamente el Sábado, sino durante toda la semana en el culto familiar. 

Si cada miembro de la familia esta demasiado ocupado como para orar juntos, entonces están mucho más ocupados de lo que Dios desea. 

La ballena y el cachalote, tiene que salir a la superficie para poder respirar, sino este bello animal se asfixiaría. 

Es el mismo sistema, si la familia no se eleva regularmente a Dios para obtener poder, corre el peligro de ser destruida.

Las oraciones compartidas aumenta nuestra capacidad para recibir las bendiciones que Dios desea concedernos.
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda venida apocalíptica
http://viajes a través del tiempo y del espacio
NOTIFICACION A LOS LECTORES.
Notificación: Estimados lectores de este blog. Oren mi salud y por este proyecto Sal. 62: 7 (a través de https:// se puede ver estos blog)

No hay comentarios:

Publicar un comentario