LA PRUEBA DE LA FE.

Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo:Abraham. Y él respondió: Heme aquí. Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a la tierra de Moriah, y ofrécemelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré. Gén. 22: 1,2.

En el blog http://judaislacris.blogspot.com Hablamos de este tema de la descendencia de Isaac y Ismael. Uno no quiere ver lo que no quiere entender. 

Dios es el que elige a sus primogénitos, aunque otra religión diga que Ismael es el primogénito, esto no así para Dios. Pero en el contesto de este verso vemos un relato para nuestro beneficio es registrado este acto de fe de Abraham. 

Nos enseña una gran lección de confianza en los requerimientos de Dios, no importa cuán apremiante y penosa sean. Pero todo tienen una gran enseñanza para los hijos de Dios y Abraham demostró una perfecta sumisión a su padre Dios. 

Con la obediencia de Abraham se nos enseña que nada es demasiado precioso para que no se lo demos a Dios. La prueba de Abraham fue la más rigurosa que pudiera haberle sobrevenido a un ser humano. 

Y hoy tenemos enfermedades muy terribles, pero nada es peor que sacrificar a tu propio hijo. 

Unos de los propósitos expreso de las Escrituras es revelarnos el carácter del Padre. ¿Que nos enseña el relato del viaje de Abraham al monte Moriah? 

Abraham estuvo durante todo el camino orando a sus Dios, él no entendía los motivos de sacrificar a sus hijo como lo hacía los paganos. Dios prueba al hombre para ver cuales son sus motivos y su fe.(Exo.16:4; Deut. 8:2.etc. 

La reina de Sabá visito visito a Salmó para “probarle con preguntas difíciles” con el fin de ver si su sabiduría era tan grande como su reputación (1º Rey. 10:1). Cuando un hombre pone aprueba a Dios tratando de obligarlo a proceder de acuerdo con los propósitos humanos. 

Esto es presunción, lo que es diferente de la fe (Exo.17:2,7; Núm. 14:22; Isa.7:12). El Altísimo nunca “tienta” a nadie (Sat. 1:13). Si lo vemos bajo la perspectiva de un Dios que nos ama y brinda alivio y curación a su pueblo cuando este lo necesita. 

Al llamar a Isaac “tu único” hijo, Dios le estaba diciendo a Abraham que su hijo era considerado como el heredero legitimo de la promesa. Abraham demostró y revindico el carácter de Dios, cuando dio a su Hijo para morir por la raza caída. 

El Pueblo que guarda los mandamientos de Dios, representa a Isaac, el hijo de la promesa, Abraham predico con su ejemplo. 

“La predicación de la palabra sería inútil sin la continua presencia y ayuda del Espíritu Santo. 

Este es el único maestro eficaz de la verdad divina. Unicamente cuando la verdad vaya al corazón acompañada por el Espíritu vivificará la conciencia y transformara la vida. Abraham fue un ejemplo nuestro. Hagamos lo mismo.

MARANATA.

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