martes, 24 de junio de 2014

EL CRISTO INCOMPARABLE.

Yo soy la rosa de Sarón, y el lirio de los valles. . . Mi amado es blanco y rubio, Señalado entre diez mil. . .Su paladar, dulcísimo y todo el codiciable. Tal es mi amado, tal es mi amigo Oh doncella de Jerusalén. Cantares. 2:1; 5:10,16

Yo soy la rosa de Sarón. Este verso de Salomón tiene una aplicación espiritual y va dirigida a Cristo. Se le da los dos títulos Rosa de Sarón y Lirio de los valles. Leí la historia de un joven Musulmán. En un lugar donde el autor no lo menciona, ustedes sabrán rápidamente quien es el personaje quien lo relata. 

Cierto dirigente de una iglesia estaba dirigiendo una semana de oración en un de nuestro colegios Oriente. Al regresar de la ciudad cierto día, fui testigo de una escena que me conmovieron y me impresionaron. Un joven estudiante estaba de rodillas delante de su airado padre árabe. 

De la boca y de la nariz del muchacho manaba sangre. El padre se volvió a hacia a mi y acaloradamente me explico que estaba pegando a su hijo con la vara para que fuese un buen hijo. Se alejo y empezó de nuevo a darle golpes en el rostro del muchacho. Note que no había lágrimas en sus ojos ni emoción en el rostro del joven, sino una mirada perdida, mi entra aguardaba el siguiente golpe.

Trate de razonar con el padre, sigue relatando este hombre; final mente el padre bien por el cansancio o por mi presencia dejo de golpear al joven. En mis años que estuve viajando a un país Árabe, esta escenas las venia a diario, bien con jóvenes o con mujeres. 

Me acerque al muchacho y puse mi mano sobre su hombro y le hable del amor de Cristo, que estaba dispuesto a perdonarnos y ayudarnos a vivir en obediencia a su voluntad. 

¿Que otra cosa podía hacer en esos momentos fuera de hablarle del que el es “señalado entre diez mil” y que Cristo era todo amor dado por Dios al hombre, vi como le salían las lágrimas de sus ojos, precisamente lo que los golpes no pudieron hacer lo hizo el amor de Cristo. ¿Como podemos hablar a una persona que es maltratada? 

Solo se puede hablar con el amor que Cristo había puesto en mi, si uno esta con Cristo el amor fluye. Términos tales como “la rosa de Sarón”, “el lirio de los valles”, “señalado entre los diez mil” y “todo él codiciable” traen a nuestros recuerdos himnos y coros aprendidos alguna vez. (ver en YouTube, la coral Vivo esta)

Estas frases, junto con el nombre de Jesús, debieran palpitar de gozo cuando se pronuncia el nombre de Jesús. Los mejores, los más dulces y los más nobles de nuestros pensamientos debieran concentrases en él. El amor es más fuerte que la fuerzas del mundo. No se refiere a un amor débil y sentimental, sino a un amor basado en principios. 

¡Cristo es incomparable! ¿Cómo nos atrae? Por medio de su vida incomparable, por medio de sus promesas incomparables y por sus doctrinas como la encarnación y la expiación y sobre todo por su venida. ¡No es maravilloso que Salomón expresara con tiernas palabras todo él es codiciable.
Promesa.
Nuestro amado Salvador nos enviará en el momento mismo en la que necesitemos. El camino del cielo quedó consagrado por sus pisadas. Cada espina que hiere nuestros pies hirió también los suyos. El cargo ante que nosotros la cruz que cada uno de nosotros ha de cargar. El Señor permite los conflictos a fin de preparar al alma para la paz”. (C.S. p.691).
Maranata.
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la Biblia a través del tiempo.

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