Cierto es, que los pecados actuales determinara la culpabilidad del hombre y mujeres.
La generación que Jesús censuró no era responsable por los pecados de sus padres , pero sus malas prácticas y su alejamiento de Dios, les hicieron responsables de su conducta de odio y venganza a perseguir a los mensajeros de Dios.
La sangre de los bueyes y los machos cabríos no podían lavar sus pecados.
Orgullosos, autosuficientes y altivos, se habían separado de la gracia divina, hasta el punto de convertirse en súbditos del rey de este mundo, Satanás.
Así es esta generación, que siendo cautivada por los placeres de este mundo lleva deslizándose hacia el abismo. Los tres autores sinópticos usan el mismo título El Hijo del Hombre.
Jesús era literalmente “el Hijo del Hombre” tanto en un sentido puramente histórico, y bíblico (Luc. 1:31-35; Rom.1:3-4; Gál. 4:4) como en un sentido más excelso.
El título “Hijo del Hombre” lo designa como el Cristo encarnado (Juan 1:14; Fil.2:6-8).
Cristo vino para salvar lo que se había perdido, es por eso que él tenía la potestad de perdonar y de rehabilitar al ser humano.
La misión de Cristo era eliminar la causa de la enfermedad que aquejaba a la hija de Jairo.
El corazón del padre tenia que ser renovado, para que la curación tuviese hesito.
La curación del cuerpo sin la curación del alma sólo podía resultar en una repetición de la conducta que había provocado la enfermedad del cuerpo.
Cristo nos proporciona un corazón nuevo, y después sana el cuerpo. Esto es lo que hizo con el hija de de Jairo.
Es lo que hace con cada uno de nosotros, nos limpia el corazón de toda mala contaminación, y después limpia nuestro cuerpo.
Así lo hizo con el paralítico, y con tantos hombres y mujeres de su tiempo.El sistema no ha cambiado, cristo nos limpia el corazón, la mente, y después viene la regeneración del cuerpo.
Tenemos muchos ejemplos en la palabra de Dios, unos de los más impactantes es la curación del paralítico que fue bajado por el techo.
No fue la fe del enfermo, sino la fe de ellos la que le salvó la vida. Hoy en nuestro siglo hay milagros como estos mencionados.
La fe de unos salva a otros, así es glorificado nuestro Dios.
Roguemos a Dios que nuestra fe no falle en el día de la prueba.
Pues la fe nuestra puede salvar a muchos que no conocen a Cristo, y que por este medio sencillo, puedan muchos conocer al Dios verdadero. “Nuestra fe, puede salvar a muchos”.
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.comb
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda venida apocalíptica
http://viajes a través del tiempo y del espacio
NOTIFICACION A LOS LECTORES.
Notificación: Estimados lectores de este blog Oren mi salud y por este proyecto Sal. 62: 7 (a través de https:// se puede ver estos blog) Si quieren recibir estudios sobre la biblia, pongan un wsap al teléfono 609 74 25 17
No hay comentarios:
Publicar un comentario