NO TE AFANES.

No te afanes para hacerte rico; Sé prudente, y desiste. ¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? Porque se harán alas como las alas de águila, y volarán al cielo. Proverbios 23:4-5

En la Biblia tenemos muchos refranes que Dios nos envía a través de su palabra. Es una parte esencial para los estudiantes de la Biblia. 

Tan bien Miguel de Cervantes, en su libro Don Quijote de la Mancha, nos define lo que es un refrán: “los refranes son sentencias breves, sacada de la experiencia y de nuestros antiguos ancianos. 

Los refranes Bíblicos son juntamente, un compendio de sabiduría de su autor: nos deja enseñanzas, nos da ejemplo, o incluso nos hace reflexionar. 

Don Cervantes también nos deja algunos ejemplos de estos refranes populares. “A quien mucho tiene, más le viene. Cuanto más se tiene, más se quiere. Tanto tienes, tanto vales. 

No es oro todo lo que reluce. Dime de que presumes y te diré de que careces.

 Y por último; El hábito no hace al monje. Estos son proverbios humanos que nos dice verdades claras. 

El autor de los proverbios fue Salomón y a través de ellos nos deja verdades claras y sencillas. No te afanes. Este verso no elogia la pereza que lleva a la pobreza. 

Es más bien un advertencia en contra de hacer de las ganancias la meta de la vida. Ningún rico entrara en el reino de los cielos. 

Amenos que este sienta un verdadero arrepentimiento de sus hechos. La sabiduría humana aconseja que uno cuide sus intereses y acumule cuanto antes sus riquezas. 

Este consejo humanos nos insta a jubilarnos pronto y a disfrutar de nuestras riquezas. 

En la práctica, los que permiten que el amor al dinero sea su principal incentivo, por regla general encuentra que no pueden descansar cuando han acumulado las ganancias de modo dudoso. 

Muchos hombres ricos han muerto sin esperanza, ya que las riquezas son inseguras. Las guerras y las crisis económicas lo han demostrado a través de los siglos. 

Cristo dejo dicho: “Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el reino de los cielos Mat. 19:23-30. Cristo hace referencia al joven rico. 

Las personas que ponen en primer lugar en su corazón y su felicidad en las riquezas, empeña su capacidad en amar. No todo en esta vida son riquezas. 

Los que han sido capaces de dejar todo, padre madre, por llevar el evangelio, ellos son ricos en Cristo. El Señor no va en contra de las riquezas, sin son ganadas lícitamente. 

Nicodemo era un hombre influyente y rico, y uso sus bienes para mantener la iglesia de Dios. La pregunta es: ¿Quién es capaz de dejarlo todo por mí y el reino de los cielos? ¿Como estoy viviendo mi vida? Para el mundo o para Cristo.

MARANATA.

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