No vivas ya de
acuerdo con las reglas de este mundo; al contrario, cambia tu maneras
de pensar para que así se renueve toda tu vida. Así llegarán a
saber cuál es la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que
le agrada y lo que es perfecto. Rom.12:2; (versión popular).
La salvación
consiste en la transformación de la mente mediante el poder de Dios.
La mente de una persona convertida está regida por la voluntad
santificada por el Espíritu.
La contaminación de la mente ocurrió
cuando el hombre decidió hacer su voluntad. Cayó debido a la caída
de la mente. Jesús así lo dijo: “Del corazón sale los malos
pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los
hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias” (Mat.15:19).
Un corazón
contaminado, tarde o temprano corrompe la vida entera. Los
pensamientos contaminados se transforman en acto perversos. El cataclismo de los tiempos de Noé se produjo debido a esa contaminación, pues “las maldad de los hombres es mucha en la tierra, y todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente al mal” (Gén. 6:5).
La palabra
“designios” proviene de un termino hebreo que significa
“amoldad”. En tiempos de Noé las inclinaciones y las pasiones
que degeneraban a la raza humana eran el modelo al cual se ajustaba
la mente del hombre.
El yo era su dios, la homosexualidad practicada
en tiempos de Noé era lo habitual, es por eso que la Biblia esta en
desacuerdo con estas practicas. En nuestros días
vemos las mismas practicas que existían en tiempos de Noé. No por
eso Pablo nos pide que no permitamos que nuestra mente se amolde a
las reglas de este mundo. Para ello debemos dejar que Dios cambie
nuestra manera de pensar.
Es evidente que las mentes humanas se están
ajustando al modelo del mundo, pero hay otra alternativa ajustarse al
modelo de Dios. No existe termino medio.
La mente es
soberana, rige el pensamiento y la acción. ¡Con cuánto cuidado
debemos vigilar las avenidas del alma! Es extraño que siempre
usemos la voluntad para cuidar nuestros bienes pero casi nunca para
guardar nuestra mente.
La imaginación es
un arma poderosa. Alberto Einstein dijo: “La imaginación es más
importante que el conocimiento”. ¡Cuanto necesitamos que nuestra
mente sea controlada por el Espíritu Santo!
El proceso por el cual Dios remodela nuestra mente se debe efectuar momento a momento pues de todo modo se introduce Satanás y vuelve a dominar.
¿Permitirás
que el Señor amolde tu mente en este día y en lo sucesivo en
conformidad con sus pensamientos? Si esta es tu decisión al igual
que la mía, tendremos salud mental, física y espiritual. Que Dios
os bendiga.
Maranata.
Sigan
orando por la vista de mi esposa.
Luis
José de Madariaga.
La
Biblia a través del tiempo.
http://
segunda venida apocalíptica
<
No hay comentarios:
Publicar un comentario