Habló el rey y
dijo: ¿No es esta la Babilonia que yo edifique para casa real con
la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad. Dan. 4:30.
Ayer estudiamos el
mensaje del segundo ángel que nos dice que “ha caído Babilonia”
(Apoc. 14.8). En los días de Juan esta palabra seguramente no se
refería a la antigua capital de Babilonia del siglo VII
.Ká.dingir.ra y Ká.dingir.ma, que significa 'Puerta de los dioses'
o 'Puerta del dios'. Algunos autores han relacionado este topónimo
con Bãbil, también escrito Ba(b)bal.
El mensaje del
segundo ángel fue escrito muchos años después de la destrucción
de esa ciudad. En la actualidad esa gran metrópolis esta casi
completamente olvidada. Pero la lección que nos enseña su caída
no ha perdido su significado. Es un símbolo de la inutilidad de
todo esfuerzo humano para rebelarse contra Dios
Imaginémonos una
ciudad circundada por imponentes muros de ladrillos, provista de
enormes puestas de bronce y llena de majestuosos palacios. Pensemos
en los bellos jardines colgantes y las grandes avenidas, era la
ciudad más bella del mundo antiguo.
En el año 1967-8 en el seminario, el profeso de teología el tema que dio fue “el trono de Satanás”.
En el año 1967-8 en el seminario, el profeso de teología el tema que dio fue “el trono de Satanás”.
Fue emocionante
saber que en cada época Satanás tenia un trono de donde el
gobernaba este mundo. Y así Babilonia se encontraba su primer trono,
y en cada época el tiene su trono.
Su plan es de convertir al mundo en títeres suyos, así que idea planes constantemente para incautar las mentes de los más jóvenes y adultos.
Cuando su trono
estaba en Jerusalén, hizo todo lo posible para hacer cesar los
planes de Dios, pero no lo logro. Babilonia cayó y fue aplastado por
las fuerzas Persas. Así Dios libro a su pueblo de la esclavitud,
Dios va librando a su pueblo de situaciones muy peligrosas.
El mundo nunca olvidara la caída de Babilonia, ni los grandes imperios.
La impresión que causo el derrumbe de Babilonia quedo grabada en los días de Juan.
El mundo nunca olvidara la caída de Babilonia, ni los grandes imperios.
La impresión que causo el derrumbe de Babilonia quedo grabada en los días de Juan.
El significado
profético de Babilonia es confusión espiritual, en otras palabras
es confusión de ideas religiosas. Tanto la Babilonia simbólica
como la literal han sido reconocidas como enemigas de la verdad de
Dios de su pueblo los que guardan los mandamiento de Dios.
En la actualidad nos
encontramos frente a un colosal imperio espiritual constituido por el
error de la falsedad introducida en la edad media por la iglesia
Católica, la adoración de imágenes, la confesión, y la
inmortalidad del alma. Notemos lo que dice Juan ha cerca de
Babilonia: “Ha hecho beber a toda las naciones del vino de su
fornicación” es decir: de sus doctrinas.
Esta acusación
significa que los es está apartando de la fuente pura de agua de
vida para beber del vino del error de sus doctrinas y de las
desobediencia hacia Dios.
La pregunta es muy
sencilla: ¿Te pondrás de parte de esta iglesia que ha cambiado los
domas establecidos por Dios? O ¿tomaras parte de aquellos que
guardan los mandamientos de Dios, y tienen la fe de Jesús?.
Maranata
Les
agradezco que sigan orando por mi vista.
Luis
José de Madariaga.
La
Biblia a través del tiempo.
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segunda venida apocalíptica
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