Es esencial que ocurra un cambio
en el pueblo de los santos; ya que se menciona en la biblia la
tibieza de ellos.
Si queremos resucitar con los cuerpos inmortales e incorruptibles (ver. 42), debemos ser transformados por el Espíritu de Dios.
Si queremos resucitar con los cuerpos inmortales e incorruptibles (ver. 42), debemos ser transformados por el Espíritu de Dios.
En tal caso que esto no fuera así, el pago sería la muerte
eterna. Lo contrario seremos transformados sin ver la muerte los que
vivan cuando Cristo regrese a la tierra en su venida. Los que hayan
pasado al descanso resucitarán y serán transformados en un abrir de
ojos.
Pablo nos dice que sólo Dios tiene inmortalidad (ver. 50; 1º
Timoteo 6:16). Sin embargo, el texto de hoy nos dice que !Dios está
dando los toques finales a su plan para comenzar a distribuir esa
cualidad divina a los seres humanos! Dios dará hombre una calidad de
vida que no poseía en la tierra.
Esto demuestra claramente que se
mantendrá la identidad individual y personal cuando ocurra esta
maravillosa transformación de nuestro cuerpo. Cada uno de los
redimidos retendrá su propio carácter individual. (ver PVGM 267,
295-296; 1º JT 242; 2º JT. 70-71).
El don de la inmortalidad será
recibido solamente por los que acepten la salvación que Dios da
mediante Jesucristo. Este don es concedido por qué el Padre nos ama.
Se que para muchos esto suena a un cuento de hadas, esto se debe a
que no han estudiado la Biblia, y por ende han rechazado al espíritu
de Dios. ¿Por qué, entonces, Dios dará vita eterna aquellos que
han sido transformados por el Espíritu Santo?
“De tal manera Dios
ha amado al hombre que estuvo dispuesto a dar lo que más quería”.
Ese es el amor de Dios, que el hombre no llega a comprender ese profundo amor.
Pero ese amor puede ser indulgente si entrega tesoros a quienes son incapaces de manejarlos.
Ese es el amor de Dios, que el hombre no llega a comprender ese profundo amor.
Pero ese amor puede ser indulgente si entrega tesoros a quienes son incapaces de manejarlos.
Dios ama al malvado que no
recibirá la vida eterna tanto como ama a quien la reciba. El don de
la vida eterna es en lo profundo una expresión de confianza.
Es el
anuncio de Dios de que confía en su propia habilidad de restaurar a
su pueblo a una lealtad completa.
Pero esta gran obra se la encomendado al Espíritu Santo, para que convenciera al hombre de su mal proceder y volviera al camino de la rectitud.
Pero esta gran obra se la encomendado al Espíritu Santo, para que convenciera al hombre de su mal proceder y volviera al camino de la rectitud.
Cuando Dios
distribuye el don de la vida eterna, está anunciando que confía en
su pueblo y que su pueblo será restaurado. El ladrón de la cruz
tuvo su oportunidad, y no la rechazo.
Pero el hombre es el que toma
la última decisión, ¿Quieres resucitar cuando venga Jesús?
Entreguemos nuestro corazón a Jesús.
MARANATA.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blogspot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
http://segunda venida apocaliptica
http://viajes a través del tiempo y del espacio
http://Alientos de vida eterna.blogsopt.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario