Estos son los que no se
contaminaron con mujeres, pues son vírgenes. Estos son los que
siguen al Cordero por dondequiera que van.
Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero; y en su boca no fue hallada mentira, pues son sin mancha delante del trono de Dios. Apoc. 14:4,5.
Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero; y en su boca no fue hallada mentira, pues son sin mancha delante del trono de Dios. Apoc. 14:4,5.
El Señor tienen un pueblo en la
tierra que sigue al Cordero por donde quiera que vaya. Tiene sus
millares que no han doblado la rodillas ante Baal. Los tales estarán
de pie junto a él en el momento en que estemos en Sion.
Pero deben permanecer es esta tierra resguardados con la armadura, listo para ocuparse en el trabajo de salvar a aquellos que están a punto de perecer. . .
No necesitamos esperar hasta que seamos trasladados para seguir a Cristo.
El pueblo de Dios puede hacer eso aquí abajo. Seguían al Cordero en las cortes celestiales sólo si lo siguen aquí. . . No debemos seguir a Cristo a intervalos o caprichosamente, solamente cuando ellos sea para nuestra conveniencia. Debemos optar por seguirlo.
En la vida diaria, debemos seguir su ejemplo, como el rebaño que sigue confiadamente a su pastor. Debemos seguir con sufrimiento por su causa, diciendo a cada paso: “Aunque él me matare, en él esperaré” (Job 13:15).
La iglesia de su vida debe ser nuestra existencia . Y cuando tratamos de ser como él y mantengamos nuestro deseos en conformidad con su voluntad, lo daremos a conocer (RH.1898).
Pero deben permanecer es esta tierra resguardados con la armadura, listo para ocuparse en el trabajo de salvar a aquellos que están a punto de perecer. . .
No necesitamos esperar hasta que seamos trasladados para seguir a Cristo.
El pueblo de Dios puede hacer eso aquí abajo. Seguían al Cordero en las cortes celestiales sólo si lo siguen aquí. . . No debemos seguir a Cristo a intervalos o caprichosamente, solamente cuando ellos sea para nuestra conveniencia. Debemos optar por seguirlo.
En la vida diaria, debemos seguir su ejemplo, como el rebaño que sigue confiadamente a su pastor. Debemos seguir con sufrimiento por su causa, diciendo a cada paso: “Aunque él me matare, en él esperaré” (Job 13:15).
La iglesia de su vida debe ser nuestra existencia . Y cuando tratamos de ser como él y mantengamos nuestro deseos en conformidad con su voluntad, lo daremos a conocer (RH.1898).
No debemos estar en el mundo de los sueños de la inacción. Somos soldados de Cristo, enrolados para la obra de demostrar nuestra lealtad hacia Aquel que nos ha redimido.
Lo que
debemos ser en el hogar
celestial, cuando se seamos salvos, eternamente salvos, será el
reflejo de lo que somos aquí en nuestro lugar de prueba nuestra
lealtad en la observancia de los mandamientos de Dios. (Ibid).
Maranata.
Luis José de Madariaga.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blospot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
htt:// segunda venida apocaliptica
http://viajesatravésdeltiempoespacio.blogspot.com
https://alientosdevidaeterna.blogspot.com
Maranata.
Luis José de Madariaga.
http://meditacionesmatinales.blogspot.com
http://lecciones-biblicas.blogspot.com
http://judaislacris.blospot.com
http://historiaybiblia.blogspot.com
htt:// segunda venida apocaliptica
http://viajesatravésdeltiempoespacio.blogspot.com
https://alientosdevidaeterna.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario