COMO JESÚS FUE UNGIDO

Cuanto a Jesús de Nazaret; cómo le ungió Dios de Espíritu Santo y de potencia; el cual anduvo haciendo bienes, y sanando a todos los oprimidos del diablo; porque Dios estaba con él. Hech. 10:38
Aunque Jesús era el Hijo de Dios, antes de que pudiera realizar su ministerio le fue necesario ser ungido por el Espíritu Santo. No se registra que Jesús haya hecho algún milagro antes de ser bautizado por Juan. 

No sabemos de tentativa alguna que se hubiera realizado contra la vida de Jesús en su juventud o en su temprana madurez, excepto aquella, cuando siendo un niño, Herodes procuró quitarle la vida. 
Podemos suponer, sin embargo, que Satanás no estaba dormido, y es posible que intentara hacer algo a Jesús. Después que Jesús fue bautizado, Satanás preparó un plan meditado con alevosía y premeditación para hacer caer a Jesús, Satanás uso todo su sabiduría y astucia para este plan y detener el ministerio del Mesías. 
Si hemos de servir al Maestro, necesitamos ser llenos del Espíritu Santo diariamente. La porción que recibimos ayer no es suficiente para hoy. Prescindir de la dosis del Espíritu Santo cada día, hora o minutos, es ponernos a nosotros mismos en el terreno de Satanás. 

Al avanzar cada día llenos del Espíritu Santo, estaremos en condiciones de obrar milagros para Dios. ¿Qué mayor milagro puede haber que el de ver entregar su corazón a Cristo a un alma por la cual hemos trabajado? La vida entera del individuo es cambiada. 

Es como si uno se levantase de los muertos. Aquel que estaba muerto en el pecado ahora llega a vivir en Cristo. Pedro da testimonio de que después de que Jesús fuera lleno del Espíritu Santo y del poder, anduvo haciendo milagros y bienes a los hombres que estaban oprimidos por el Diablo. 

Alguien podría ayudar a un vecino que ha empobrecido. Es posible que podemos dar grandes sumas para el avance de la causa de Dios. Cualquier cosa que hagamos tendrá las mejores probabilidades de éxito si nos asociamos con el Espíritu Santo. La historia de Jorge Mulle. 

Por muchos años dirigió un orfanato en Bristol, Inglaterra. 

Carecía de fondos y no lo solicitaba, no obstante recibió alimentos y vistió a sus niños. Su fuente de ayuda era la oración a Dios por su Espíritu Dios envió a través de persona dinero y alimentos y otras cosas que necesitaba. 

La experiencia de Muller es la del poder de Dios en la vida del hombre. 

Ese era el poder que llenó la vida de Jesús. Este es el poder que puede llenar nuestra vida. Amen Así sea Señor Jesús.

Maranata

Luis José de Madariaga.

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