jueves, 7 de diciembre de 2017

PACIENTE ESPÍRITU DE JEHOVÁ.


Tú que te dices casa de Jacob, ¿se ha acortado el Espíritu de Jehová? ¿Son estas sus obras? ¿No hacen mis palabras bien al que camina rectamente? Miqueas 2:7

¿Se ha sentido alguna vez con deseos de atacar a un amigo que quiere decirle la verdad de los hechos acaecidos en ese día? Es improbable, pero puede suceder. A menudo los mensajeros de Dios son tratados de esa manera. 

Miqueas esta reprendiendo a los que hablan (ver.6) por expresar pensamientos ajenos al espíritu de Dios. El profeta reprende a los que acusan al Señor de ser impaciente porque se rebaja a amenazar al pueblo. Eso no es así, pues Dios ha sido longánime en su trato con su pueblo. 

Experiencia: Cierto día de sábado, puesto el sol, cierto miembro estaba diciendo, hay que vender el templo y construir otro mayor, con las tres iglesias. “Yo” le respondí: Según el Espíritu de Profecía eso no es correcto, esta iglesia es la luz para este zona de la ciudad. 

A partir de ese momento fui desterrado de muchos cargos, incluso de predicar. 
 Dos veces él Señor ha dicho no, pero los hombres no convertidos aran su obra. 

El profeta Miqueas enfrentó muchas situaciones difíciles en su vida. 

Había dado fielmente su mensaje de advertencia a Judá en un tiempo de apostasía nacional, ¿No está pasando el pueblo de Dios algo similar? Y como resultado la gente estaba contra él. ¿Por qué no predico acerca de la paz y la seguridad como lo hicieron los falsos profetas? 

¿Era impaciente el Espíritu de Dios al advertir de un juicio venidero? Hay pastores que no les gusta que le digan la verdad. 

Les molestan y arremeten contra el miembro que se lo dicho. 
Con el tiempo se vio que aquel miembro decida la verdad. Cierto es que el Espíritu Santo es muy paciente y benévolo y amante. 

Todos cometemos grandes errores, el problema es reconocerlo y humillarse ante Dios y su hermano. “Eso es muy difícil”El castigo y los juicios no vienen porque Dios lo quiere así (Sal.103:8-14; Eze. 18:25-32). 

El es un Dios de amor y se deleita en la misericordia. El castigo le es una “extraña obra”, un “acto entraño” pues ajeno a su naturaleza. (Isa.28:21; Jer.31:20; Lam.3:32-33;1 Juan4:7-8). 

En este sentido, el pecador se castiga así mismo, nuestro castigo son nuestras propias “obras”.  

El Espíritu de Dios nunca actuara impulsivamente contra ti. Hará todo lo que este para hacernos comprender el error y el buen hacer, para que caminemos en el camino correcto. 

No hay cosa más hermosa, que caminar al lado del Espíritu Santo en este mundo. El camino se hace al andar con el Espíritu Santo. Amen.

[Os pido que oréis por mi, tengo una alergia que me ataca todo el cuerpo y los ojos, y no tengo ganas de hacer nada. Os ruego humildemente que oréis por mi, para que siga haciendo esta obra. Que Dios os bendiga.]
Maranata:
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