¿HABÉIS DE HACER ACPCIÓN DE PERSONAS?

¿Habéis de pleitear vosotros por Dios? Job. 13:8

En el libro de Job encontramos la historia de cuatro hombre muy diferentes a pesar de su religiosidad. 

Mucho cristianos sincero han meditado en las cosas de Job, sometido a una serie de inexplicables pruebas que él no entendía. 

Para su “amigos” no querían hacer acepción sobre lo que le estaba pasando a Job. Querían ser imparcial. Para estos amigos del oriente, creían que Job estaba siendo castigado por Dios. Esta creencia subsiste todavía en el Oriente y Occidente. Job no pensaba igual que su amigos. 

El no captaba la idea de sus amigo. El se auto culpo, ¡les dijo que el eran miserables consoladores! (Job. 16:2). El hecho es que Job tenia una fe increíble en Dios. 
¡Ojalá todos tuviésemos la fe y la confianza de Job en estos tiempos! El hecho es que Job seguía teniendo una fe inquebrantable en su Dios. 

El creía que su relación era correcta con Dios. Él sabía que Dios no iba a tratarle mal como sostenían sus amigos. Job desafía a sus “amigos: ¿Sabían quien era realmente Él? De oídas te oí, pero no lo conocían. 

Aveces en el siglo XXI hay persona que no conocen a Dios, han oído hablar de Él, pero no han tenido esa experiencia con Él. Job sabía como era Dios, a pesar de sus actuales circunstancias. 

“Quizá yo les amonestaría incluyéndome a mi, de que no conocemos a Dios realmente como es” “El cristiano aveces tenemos la inteligencia de un mosquito raquítico”. 

No vemos más aya de lo infinito. Dios no permite que sus hijos sufran, auque ellos no lo comprenda. Aunque Job experimento el dolor, los picores, siempre se dirige a Dios, a pesar del terrible agotamiento y del dolor. 

Una pregunta simple: ”¡Quien mediera conocer a Dios!” Yo iría hasta su trono. Expondría mi causa delante de él, y llenaría mi boca de argumentos” (Job 23:3,4). El sabía que Dios era justo y razonable. Al igual que nosotros. 

Job no tenia temor de hablar con Dios. Nosotros tampoco debemos tener temor de hablar con Dios. 

Tenemos a Jesús como nuestro intercesor. ”Tú sabrías lo que él te respondería, Y entenderás lo que él te dijera” Yo siempre digo que hay que ser como niño, sinceros, y limpios de corazón. 

Dios lo que más aprecia de sus hijos y hijas es la sinceridad. Y eso es un don del Espíritu Santo. 
Siempre lo diré: Estamos en tiempos muy solemnes, y tenemos a nuestro Padre dispuesto a escucharnos. acerquémonos al trono de la gracia, para demandar misericordia y fuerzas para sele fiel. Amen.

Maranata.

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