miércoles, 29 de mayo de 2019

"Yo fui fiel y obediente"

Mas él, respondiendo, dijo el padre: He aquí, tantos años te sirvo, no habiendo desobedecido jamás y nunca me has dado ni un cabrito para gozarme con mis amigos. Luca 15:29.

Muchos comentadores sostienen que el hijo actuaba como siervo y no como hijo. “Este siervo” se creía con el derecho de reclamar lo que ya era suyo. 

Reprochaba al padre, por no tener una atención con el. Se pasaba todo el día arando con los bueyes, haciendo los surcos para la siembra. Era un trabajo cansado y agotador. No se quejaba, de su ardo trabajo, pero actuaba como un siervo. 

Esperaba una recompensa por su ardo trabajo, para compartirla con sus amigos. Nunca desobedeció a su padre, pero el no tenía la confianza que debe tener un hijo con su padre. Notamos un pequeño reproche: “Nunca me has dado nada”. 

O “a mí nunca me distes nada”. Reprochando la actitud que tenía el padre con su hermano menor. Vemos unos celos con arrogancia, ya que el padre había tenido una atención con su hermano menor. 

La protesta del hijo mayor era justa a su juicio, pero era una intolerancia hacia su padre. 

Su orgullo y su arrogancia le llevo ha decir: ni siquiera me has dado un “cabrito” y mucho menos un “becerro gordo”. 

Si profundizamos más la tragedia es mas profunda. La envidia, los celos, el egoísmo y un largo Etc. 

Toda esa mezcla exploto ese día. El tenía todo, todo era suyo, pero no lo entendió. Hay una expresión muy dolorosa para el Padre. 

“Este tu hijo” El hijo mayor era egoísta y mezquino que Jesus no necesitó insistir en ello. Os ruego estimados hermanos en Cristo que nos miremos nosotros en este pasaje. Cuanta mezquindad hay en cada uno de nosotros. 

Somos hijos de Dios, y todavía no hemos confiado en sus promesa, “yo” me pongo en primer lugar” , no se vosotros, cada uno tiene su conciencia para determinar si es así. Se ha derramado grandes bendiciones sobre nosotros, y aun somos desagradecidos. 

Se nos ha prometido la Nueva jerusalén, la vida eterna, y la fuerza del Espíritu Santo para ganar grandes batallas. 

El campo del hijo mayor, junto con las herramientas para labrar la tierra, demostró su desprecio por las cosechas y por el Padre. 

El pueblo de Dios lleno de sabiduría, ¿no entiende esto? El mundo es el campo, nosotros somos sus hijos, y somos egoístas por qué no hemos entendido nada todavía. 

La vida eterna está delante de nosotros, vallamos a salvar a los hijos pródigos que hay en el mundo. “Porque muchos son llamados, pero poco los escogidos”. Mat. 22:14
MARANATA.
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NOTIFICACION A LOS LECTORES.
Notificación: Estimados lectores de este blog. Hace tiempo que parezco de un problema de salud, que abecés me impide desarrollar este ministerio. En otras ocasiones les pedí que orase por mi, y sus oraciones fueron contestadas, pues recupere la salud. Hoy les insto a que oren por mi, para que me recupere de esta dolencia que arrastro barios meses. Se que vuestras oraciones llegaran al trono de la gracia y si es la voluntad de Dios me pondré bien. Las oraciones del justo llegan al trono de la gracia. El Señor nos dice: Orar los unos por los otros para que Vuestro Padre sea glorificado. Que Dios os bendiga y que su paz sea sobre ustedes. Sal. 62: 7

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