UNA ADVERTENCIA AL MUNDO.

Como fue en los días de Noé, así también será en los días del Hijo del Hombre. Comían, bebían, se casaban y se daba en casamiento, hasta el día en que entró Noé en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos. Luc. 17:26, 27.

El Señor de Israel es celoso de su hora. Y no tardará en sentenciar su justicia como algunos lo creen. 

El casarse no es malo, pero el divorciase para volverse a casar por incompatibilidad de caracteres no es lo correcto. Dios advierte a este mundo como lo hizo en tiempos pasados. El mundo se olvida de dar gracias a Dios por su mantenimiento. No le da las gracias, más bien lo rechaza y lo niegan. 

Una cosa son las palabras y otra los hechos. Son como los habitantes antediluvianos, que fueron destruidos porque obraban continuamente en oposición a Dios. De los antediluvianos leemos: “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todos los designios de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. . . 

Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la tierra”, (Gén. 6:5, 13). Dios advirtió a los habitantes del mundo antiguo de lo que se proponía hacer para limpiar de su impureza. 

La gran teoría de la evolución hace de que el hombre no crea en Dios. Pero hay una inquietud entre los gobiernos, y los astrónomos, Einstein en su teoría de la relatividad ya lo predijo. El universo se esta acelerando y las galaxias se están expandiendo. 

En la tierra hay violencia, criminalidad, vicios, inmoralidad, y una inquietud por una tercera guerra nuclear. 

El mundo antiguo se burlo de Noé, el mundo moderno del siglo XXI se burla de lo que dice los Adventista del Séptimo día, porque presenta la venida de Jesús en las nubes. 

Cuando Cristo estuvo en la tierra amonestó sobre lo que le sucedería a Jerusalén porque el pueblo rechazo a Jesús como él Mesías. El el año 70 d.C. Jerusalén fue destruido. Dios envía a sus embajadores a dar testimonio de que su ley es inmutable, y que el Sábado esta siendo violado por el hombre. 

Las advertencia de su Venida es inminente Según Apoc. 14, El llamado de Dios a salir del error, Apoc. 18; y 20:1-14. Algunos escucharán estas amonestaciones, pero la gran mayoría no les prestara atención. Así será cuando Cristo venga. 

Así será cuando Cristo venga. Agricultores, comerciantes, abogados, fabricantes, estarán completamente ocupados con sus negocios y el día del Señor vendrá sobre ellos como lazo. (Manuscrito 1897). El nuevo correo, para que mandésis buestras experiencias con Cristo es:lospilaresdeluniverso.@gemail.com

Maranata.
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