Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tu habitaciones sean extendidas; no seas (escasas) alarga tus cuerdas y refuerza tus estacas. Isa. 54:2
La seguridad de una Jaima o Carpa está basada en la longitud de sus cuerdas y en la fuerza de sus estacas.
Los beduinos del desierto Arábigo saben por experiencia que una buena estaca y una buena cuerda podría depender su vida.
Las palabras del profeta Isaias son bien sabidas por los beduinos o bereberes. Si las cuerdas y las estacas están puesta correctamente la carpa o Jaima, soportaran los vientos del desierto.
¿Cuáles son las cuerdas y las estacas que aseguran la seguridad del cristiano? ¿Donde as puesto tu tienda o Jaima? Algunos piensan inmediatamente en la fe y el amor.
Sin fe es imposible agradar a Dios. Otros dicen: Sin amor no hay deseo de servir. Isaias instó a Israel a ensanchar el sitio de sus tiendas y las cortinas de su habitaciones. Canaan era el sitio de sus tienda.
Al aumentar el número de sus habitantes, éstos debían extender sus fronteras hasta que su reino abarcara todo el Oriente.
Israel no llevó acabo su misión divina. Se volvió egocéntrico, orgulloso, egoísta y presuntuoso. Las cuerdas fueron acortadas y sus estacas debilitadas. El castigo de Dios fue sobre ellos.
La nación fu esparcida por los cuatro puntos cardinales. Es absorbida por el mundo en lugar de abarcar el mundo con el mensaje divino de la salvación. ¡Que lástima que Israel no siguiera los consejos de Dios! Si lo hubiera hecho la historia del mundo habría sido diferente.
El Israel espiritual no ha aprendido nada de esta lección. La gran Europa esta sumida en su propio orgullo y ignorancia. Para llegar a formar parte del reino de Dios debemos hacer su voluntad en la tierra. Su Espíritu nos mostrará su voluntad y nos ayudará a hacerla.
Debemos alargar las cuerdas, en nuestro barrio, en los pueblos o en las ciudades. Debemos usar las habilidades que nos ha concedido Dios. Debemos dar el mensaje de los tres ángeles. Cristo esta a las puertas. Esa es nuestra habitación. Debemos vencer al mundo, o el mundo nos vencerá.
Si queremos ensanchar nuestra habitaciones alargando las cuerdas, debemos fortalecer las estacas: debemos tener más amor por los menos desfavorecidos sea dentro o fuera hasta que el amor de Jesús sea implantado en el corazón del hombre y mujeres.
Sólo así las cuerdas resistirán. Dios, el gran Fabricante de la Jaima o carpa, está examinando las cuerdas y las estacas de nuestra habitación. ¿Qué encontrara Cristo en nuestra Jaima?
Maranata
Luis
José de Madariaga.
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segunda venida apocalíptica.
La
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